El sol y el frío al que te expones cuando subes a la montaña pueden ser nocivos para tu piel. Por eso, si estás por subir a esquiar acuérdate de llevar un filtro solar de alta protección, bálsamo de labios y alguna crema hidratante que te ayude a recuperar la piel al final de la jornada.
25 de Agosto de 2006 | 09:12 |
Peligro UV
La agresión más peligrosa es la de las radiaciones UV, que son los que deshidratan, queman la piel y degeneran las células. Se recomienda evitar la exposición entre las 12:00 y las 14:00 horas, y si vas a estar al aire libre en esa hora, necesitas alta protección.
Los dermatólogos advierten que este daño es acumulativo, y en gran parte responsable de que la piel se deteriore antes de tiempo y del riesgo de cáncer. Se sabe también que el 80 por ciento del daño solar se produce antes de los 18 años, aunque no se manifieste hasta años más tarde. De ahí la importancia de protegerse ahora, cuando todavía hay tiempo.
Frío + viento
Además de lo peligroso que puede ser la sobreexposición al sol, en la montaña también nos vemos enfrentadas al frío y el viento, que pueden ser importantes agresores. Esto, porque los cambios climáticos sensibilizan la piel, ya que se produce una vasoconstricción que no permite una buena irrigación sanguínea. Entonces la piel de la cara y las manos, que son las más expuestas, se reseca y puede irritarse.
Protégete ya
No deberías subir a la montaña sin llevar un filtro de protección solar adecuado. No menos de FPS 30, y si tu piel es muy blanca y/o sensible entonces escoge uno SPF 60.
Debes aplicar el filtro media hora antes de salir a la nieve, y reaplicar cada dos horas.
Es mejor escoger productos resistentes al agua, para que no se desprendan con facilidad al contacto con la nieve.
No olvides usar también un bálsamo de labios con filtro de protección solar, que evite las quemaduras e hidrate.
Al final del día puedes ayudar a la recuperación de la piel aplicando con generosidad una crema hidratante.
Por último, indispensable llevar anteojos oscuros, ya que la radiación UV puede producir cataratas precoces.
