Nos recibe en el estudio de la Rock & Pop, donde conduce "El Mañanero", un programa en el que mezcla noticias que va leyendo en línea, con los comentarios que le mandan por mail (que a veces contesta y otras simplemente lee) y los comentarios de los temas que va presentando. A todo, esta vez, le suma la entrevista; así es que contesta mientras el tema está al aire, luego le habla a sus auditores, hace acotaciones, lee la pantalla de su computador, responde, reflexiona, maneja él mismo la grabadora para que esté más cerca suyo e, increíblemente, no pierde ni una vez el hilo de la conversación... ¡parece que hasta podría hacerse las preguntas!
Tiene la vitalidad de los 20 años recién cumplidos, pero mucho más que eso: un vocabulario no habitual entre su generación y una capacidad de trabajo impresionante y, a pesar de su edad, no es nuevo en esto, ya van cinco años desde que se inscribió en un taller de la "Zona de Contacto" de El Mercurio para ser uno de sus colaboradores; después vino la radio y la televisión, así que debió congelar la carrera de periodismo por un tiempo.
-¿Eres realmente el niño prodigio que todos dicen?
"No sé... siempre dicen eso. Hago muchas cosas al mismo tiempo y soy muy chico, pero –no sé- eso tiene que evaluarlo la gente. Me molesta el tema de "el niño"... ¡estoy bien viejo! ¡tengo 20 años!"
-¡Viejo a los 20 años!
"Es que hago muchas cosas, trato de ser buena persona, no me desespero mucho, trato de ser equilibrado, estudio las ofertas que recibo, sé dónde colaborar. Creo que ése es el punto: sé qué cosas hacer y qué quiero llegar a hacer; me han llegado ofertas que me parecen buenas ideas, principalmente de programas juveniles, pero no es lo mío; yo hago periodismo, infoentretenimiento. No podría hacer un noticiero serio ni tampoco uno muy jodón, lo mío está al medio".
"Creo que a futuro la gente va a necesitar que le entreguen noticias, pero de forma divertida ¿Cachai? ¡el fenómeno Jon Stewart! El comediante actor que cuenta las noticias y es más creíble que un Tom Brokow, de la NBC o un Repenning de MEGA; como todos serios y aburriiidos. No sé, yo no les creo, no me parece que la gente sea tan objetiva. La objetividad es falsa; a todos nos cae mal alguien, a todos nos revientan las pelotas con ciertas cosas".
-¿Cada uno ve las cosas desde su vereda?
"Claro y no es indecente; yo creo que nos acostumbramos a quedar bien con todos en este país y, a mí, eso me importa un carajo. Que la gente me odie o me quiera me da lo mismo, lo importante es que estén ahí y las reacciones que puedan provocar".
-Sé que te carga que te comparen con Sergio Lagos, pero hablas igual que él, casi con el mismo acento.
"Es que tenemos como esa cosa medio hiperkinética, aunque creo que Sergio es un animador adulto... es de los importaaantes... a mí me queda mucho y lo mío va por otro lado; no sé si me vería animando un reality o quizás estoy escupiendo al cielo.
"Me gustaría animar un premio MTV o un programa que esté a mi medida, que no tenga tanto rating, que funcione bien con los auspiciadores, que apunte a un público. Me parece que hoy todos quieren llegar a tooodos y no está bueno eso".
Insiste en que le parece bien que se hagan programas masivos, pero que no todos tienen que ser así; cree que se puede hacer "algo inteligente para harta gente, pero sin limitaciones o codificaciones. Eso es falso y no me gusta".
-¿Por qué dejaste los estudios?
"No, sigo estudiando, pero presioné pausa en el segundo semestre de la universidad, porque tuve que asumir el desafío de hacer este programa en la mañana; creo que tenía que afirmarlo. Para mí, las primeras semanas, fueron conocerme y reconocerme al aire en un espacio diario. Partí semanalmente y cambiar a todos los días es un proceso complejo. Además reemplacé a un clásico de la Rock & Pop, así que tuve que concentrarme, rediseñarlo, inventar los términos... que no fuera un programa de música y noticias como todos".
-¿Cómo te defines? ¿Creativo, creador?
"Soy un tipo creativo, que trata de armar equipos, me parece que tengo la capacidad de diseñar proyectos, no soy muy apegado a lo material –más allá de que me guste tener accesorios tecnológicos y todo eso-".
-Dicen que con este éxito rápido te has vuelto ególatra, ¿es así?
"No sé, todos somos muy yoyoístas y a los que les molesta, también deben serlo. No sé si soy ególatra, pero ¡yo me quiero!, no soy lindo, pero me quiero, digámoslo con todas sus letras".
-¿Por qué te quieres?
"Me gusta lo que hago, me caigo bien; si fuera amigo mío, la pasaría bien; aunque también me odiaría si me cayera mal, me querría, no sé, disparar y todas esas cosas.
"Al contrario de lo que dicen, yo creo que era mucho más ególatra más chico; con el tiempo he aprendido a equivocarme y a decir
¡La embarré!".
-¿No crees que has crecido muy rápido, porque me acabas de decir que estás viejo y tienes apenas 20 años?
"No sé, yo siempre hablé así. Trabajo desde los 15, así que mi éxito no ha sido rápido, si así fuera andaría en auto. Me muevo en metro, caminando, porque me gusta que la gente me salude y converso; tengo interacción, no me gusta la cosa de aislarse.
"Siempre está la tentación: te va bien, empiezas a aparecer. Trato de no leer mis entrevistas, a pesar de que me manejo, sé qué decir, sé cómo decirlo, pero no se me infla el ego. Además, tengo personas que equilibran eso – mi familia, mis amigos-, me pegan palos, pero está bien".
-¿Tus amigos tienen tu edad?
"Claro, yo creo que hoy la gente sub-23 la está llevado, profundamente, porque está haciendo todo lo que las generaciones anteriores no hicieron; ésas se dedicaron a emborracharse en la universidad, a joder mucho y olvidar que después hay todo un futuro para hacer cosas, para generar. Así me defino, un generador; me gusta armar eventos, ideas, colaborar, siempre te lanzo algo. No creo que las ideas agoten y ése es mi capital, que no tiene mucha gente".
-¿Tal vez por eso eres muy desordenado y tu papá tiene que manejarte las platas?
"Sí, soy muy desordenado, pero ya no me pasa plata para la semana como antes, eso es un mito, ahora tengo mi tarjeta y todo. Ahora ya puedo aprender a manejar el dinero y calculo el mes y todo eso. Ya he comprado a crédito y lo he pagado; soy medio obsesivo, me asustan las deudas y las cartolas".
- ¿Cómo te relacionas con la tecnología?
"Siempre me llamó la atención hacer sitios web, escribir, pero es tan complejo, es tan aburrido programar, por lo menos para mí que no soy bueno con las matemáticas; entonces, el blog es una plataforma para subir fácilmente un sitio web a internet sin tener que configurarlo en demasía.
"Inserto textos que puedo escribirlos en cualquier parte del mundo, lo que provoca que yo tenga una interacción directa con la gente que me ve, que me escribe o que me conoce en la calle".
-Te califican como "Patricio Navia sub-20" por la cantidad de visitantes que tiene tu blog.
"Sí, tengo muy buen feed back, porque partí a los 15 años. Es como un registro de mi vida y es bonito eso, porque cuando me muera va a seguir mi blog".
Copano asegura que su generación es mucho menos egoísta, porque todo se comparte a través de internet. Insiste que aunque muchos le critican a los jóvenes que "se miran al ombligo, que son ombliguistas", son mucho más democráticos, porque no tienen barreras ni prejuicios para unirse e interactuar en la red.
Continúa leyendo:
La radio como sustento emocional
"Me gustan las mujeres mayores, no tengo límites"
