"¡Siempre me dejas sola!". "¡Sólo piensas en ti!". Son quejas recurrentes en algunas parejas. Pero detrás de esa rabia, hay muchos otros sentimientos que las personas no suelen mostrar de buenas a primeras.
"Qué distinto sería si, en vez de esa crítica permanente, alguien se atreviera a decir: 'Me gustaría pasar más tiempo contigo, porque te quiero y te necesito'. Sin embargo, cuando las personas se sienten heridas, suelen usar mecanismos de defensa y de ataque. No se atreven a mostrar su vulnerabilidad", explica el doctor Scott Woolley, experto mundial en la Terapia de Pareja Centrada en las Emociones (EFT), quien estuvo en Chile para participar en el 8° Congreso de Psicoterapia y en un seminario en la U. del Desarrollo.
"La EFT es una herramienta poderosa para ayudar a las parejas a tener una relación más satisfactoria. Se basa en la premisa de que la 'emoción' es lo que impulsa las relaciones. Las parejas se arman por motivos emocionales y... se divorcian por el mismo tipo de causas. Por eso, este enfoque terapéutico usa las emociones como agentes de cambio", dice el norteamericano autor del libro "Becoming an Emotionally Focused Couple Therapist", junto a Susan Johnson y Les Greenberg, creadores de la EFT.
| Resultados |
| 70% de las parejas mejoró después de 8 a 12 sesiones de terapia centrada en las emociones y dos años después, mostraron muy pocas evidencias de deterioro, según un estudio estadounidense.font> |
Este tipo de terapia busca ampliar el registro de emociones que los miembros de la pareja suelen mostrarse. Y eso provoca que se vean mutuamente de un modo distinto.
"Si alguien está desilusionado de su pareja por alguna razón, todas las cosas que perciba de ella van a estar teñidas por ese sentimiento, y pequeños gestos van a confirmar la opinión que tiene de ella, aumentando su rabia. Así, se producen círculos de relación donde lo que prima son las emociones más fácilmente expresables, como la ira", explica la psicóloga Diana Rivera, una de las pocas expertas chilenas en este enfoque terapéutico.
Pero hay otras emociones que cuesta más expresar y que están detrás de la rabia, de la crítica y de la queja. "Por ejemplo, el miedo, la vergüenza, la inseguridad, lo cual nos hace sentirnos más frágiles. Sin embargo, el amor es estar vulnerables frente al otro", dice Diana Rivera.
La EFT propone crear un espacio seguro, de confianza, en el cual las personas se atrevan a mostrar sus sentimientos más profundos, guiados por las preguntas del terapeuta.
Esto provoca que los miembros de la pareja empiecen a percibir y a sentir nuevas cosas frente al otro -compasión, confianza, comprensión-, lo que puede llevar a cambiar la dinámica de la relación.
Paso a paso
Hay otros tipos de terapias de pareja que buscan efectos similares, pero lo particular en la EFT es que propone pasos concretos para llegar a estos cambios.
En total, son nueve pasos, pero pueden resumirse en tres grandes etapas, explica Diana Rivera.
La primera es observar los conflictos cotidianos y reconocer las pautas recurrentes que no permiten que los cónyuges se encuentren. Después, viene la apertura a emociones no expresadas habitualmente y que permiten el cambio en la percepción del otro. Y, finalmente, la etapa de asentamiento de las nuevas pautas de relación.
Este enfoque propone también identificar si hay "daño" o "injuria" al "apego" de la pareja; lo que ocurre con eventos traumáticos que han dañado el vínculo entre ambos. Por ejemplo, situaciones en que uno de los dos ha estado muy vulnerable -por una enfermedad, un duelo etc.- y no ha sentido el apoyo del otro. Para poder avanzar en la terapia, es necesario volver a estas situaciones y reparar el vínculo dañado.
Estar fuera
En ocasiones, las parejas llegan a terapia y ésta no avanza como es deseable. La causa puede ser que uno de los dos ya está desvinculado emocionalmente de la relación.
"A veces, las personas consultan después de 20 años de problemas porque quieren darse una última oportunidad. Pero puede ser que su pareja ya dejó de serle significativa", dice la psicóloga Diana Rivera.
"Por eso, a veces, es preferible recibir a una pareja peleando que a otra a la que le da un poco lo mismo el asunto. Mientras se sigan sintiendo emociones intensas por el otro, es porque todavía te importa".
