Estará en los kioskos de todo Estados Unidos como la Mujer del Año 2009.
Y vestida con un vaporoso traje rojo, la Primera Dama, Michelle Obama, se apresta a dar otro golpe a la cátedra al ser la protagonista de la portada de la revista "Glamour" del mes de diciembre.
Este hecho no se había dado nunca y será motivo de análisis por los expertos de moda y también por los analistas de los círculos políticos.
Según declaró al diario español ABC la editora de Glamour, Cindi Leive, han escogido a la Primera Dama para la portada del número de diciembre de la edición estadounidense no por ser un icono de estilo (que lo es al otro lado del charco), sino por su dedicación a los niños y su apoyo a las mujeres jóvenes emprendedoras.
La sesión de fotos es única, no sólo porque Michelle es la primera Primera Dama en posar para la revista, sino porque el editorial se hizo en el interior de la Casa Blanca.
Según se adelantó, Michelle Obama no sólo habla de su labor como esposa del Presidente de Estados Unidos, sino que lo hace de moda. Se adelantó que ella entiende que la gente tenga una opinión sobre su estilo, más aún siendo la Primera Dama, ya que representa a su nación. Y muy diplomática asegura que intenta equilibrar su propio estilo con los consejos que recibe.
En ABC se afirma que ella no concede demasiada importancia a la belleza exterior. «Que un hombre sea guapo está bien, pero la belleza dura lo que dura», y añade: «No miréis la cuenta corriente ni su posición. Mirad el corazón. Mirad el alma. Nadie debería estar con una persona que no le hace completamente feliz y que no le hace sentir plena».