Washington. - Los niveles elevados de tres proteínas muestran que el cáncer de ovario está comenzando a crecer años antes de que una mujer sea diagnosticada, pero no aumentan lo suficientemente rápido como para ser un indicador temprano de la enfermedad, informaron investigadores estadounidenses.
Los expertos analizaron muestras de sangre de un ensayo clínico amplio e identificaron a 34 mujeres con cáncer de ovario y a un grupo de control de 70 participantes que no tenían la enfermedad. Sus muestras sanguíneas se usaron para evaluar seis proteínas consideradas como posibles indicadores del cáncer de ovario.
Los niveles de tres de las proteínas comenzaron a aumentar lentamente en las pacientes con tumores ováricos tres años antes del diagnóstico de la enfermedad, pero no alcanzaron un nivel que pudiera ser detectado por un programa de control, indicó el equipo en Journal of the National Cancer Institute.
"Aunque parece que en las mujeres con cáncer se inicia un aumento (de estas proteínas) quizá tres años antes de que sus síntomas las lleven al médico, los niveles no son realmente los que definiríamos como anormales hasta el último año previo al diagnóstico", señaló el director del estudio, Garnet Anderson, del Instituto de Investigación del Cáncer Fred Hutchinson, en Seattle.
No existe un mecanismo de control simple y confiable para evaluar el riesgo de cáncer de ovario en las mujeres que no presentan síntomas.
El cáncer ovárico, que afecta principalmente a las mujeres mayores, causa más muertes que cualquier otro tumor del sistema reproductivo femenino. Según la Sociedad Estadounidense del Cáncer, las mujeres diagnosticadas en estadios tempranos tienen una tasa de supervivencia a cinco años de casi el 93 por ciento.
En busca de la detección precoz
Los investigadores que están buscando un programa de control que permita detectar el cáncer de ovario esperan encontrar algo similar a lo que es el PSA para la detección de los tumores de próstata, dijo Anderson.
El PSA, o antígeno prostático específico, es una proteína que se evalúa para identificar de manera temprana el cáncer prostático en los hombres.
"Quisiéramos eso para el cáncer de ovario porque está claro que las mujeres en las que se detecta en el estadio en que la enfermedad aún está confinada a los ovarios obtienen buenos resultados. Su pronóstico es excelente", expresó Anderson.
"La CA125, que es uno de los indicadores que observamos, es el mejor biomarcador que se ha identificado hasta la fecha y nuestro estudio confirma eso y también este período de prediagnóstico. Pero no es lo suficientemente preciso", añadió el experto.
En un editorial que acompañó al estudio, Patricia Hartge, del Instituto Nacional del Cáncer, dijo que los autores habían llevado la investigación un paso más cerca del diseño de un programa exitoso de control del cáncer de ovario.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos estiman que se destinan más de 2.200 millones de dólares anuales al tratamiento del cáncer de ovario sólo en el país norteamericano.