Las marcas de belleza no dejan de innovar y cada cierto tiempo sorprenden a sus clientes con nuevos productos que incluyen componentes que para algunos pueden parecer insólitos, pero que -aseguran las compañías- tienen positivos efectos sobre la piel.
La empresa Avani, por ejemplo, apeló a las leyendas del antiguo Egipto, según las cuales la reina Cleopatra pidió a Marco Antonio conquistar la baja Jordania para poder disfrutar de todas las propiedades naturales que ofrecía -y ofrece- el Mar Muerto.
De esta manera, la compañía trajo a Chile una nueva línea cosmética cuyos productos están elaborados en base a exóticos minerales provenientes de ese lago de agua salada ubicado 416 metros bajo el nivel del mar. Además, jabones, cremas, sales y máscaras, entre otros, están enriquecidas con extractos de plantas, aceites esenciales y vitaminas.
“¿Qué hace que estos ingredientes sean tan especiales?”, se preguntarán muchos. Según afirman en Avani, las sales minerales provenientes del Mar Muerto poseen efectos relajantes, antialérgicos, calmantes, hidratantes y supernutritivos. Además, fortalecen el organismo y revitalizan el tejido celular de la piel.
De ahí, entonces, que sus baños de barro sean reconocidos internacionalmente por sus excepcionales cualidades terapéuticas. Asimismo, anualmente miles de personas se sumergen -o más bien flotan- en sus aguas con el objetivo de rejuvenecerse, recuperarse, descansar y relajarse.
El agua del Mar Muerto contiene 21 minerales distintos, tales como hierro, magnesio, cloruro de calcio, sodio, bromo y potasio. Sus concentraciones son elevadas y algunos de ellos no se encuentran en ningún otro mar.
El poder de la naturaleza
Aprovechando la llegada del verano, Weleda sacó al mercado una serie de productos elaborados con materias primas de origen natural, cuyo objetivo es ayudar a la piel a enfrentar de mejor manera las agresiones a las que está expuesta en este período, como los rayos UV o la tendencia a la deshidratación.
Un ejemplo es el Aceite Corporal de Citrus, ideal para pieles secas. Este producto está elaborado en base a aceite de almendra dulce y su aroma cítrico proporciona una inmediata sensación de bienestar. Asimismo, suaviza, hidrata y mantienen la elasticidad de la piel, lo que lo hace ideal para el cuidado diario y para un masaje tonificante.
Para proteger, nutrir y preservar la vitalidad de la piel, Weleda ofrece el Aceite Corporal de Espino Amarillo -arbusto rico en vitaminas, aminoácidos y flavonoides-, también elaborado con sésamo, naranja y mandarina. Este producto ayuda a recuperar la elasticidad de la piel, regenerando y suavizando. Es recomendado como protección frente a condiciones climáticas extremas.
Y como los pies también sufren los embates del calor, la crema Sani Pies promete protegerlos, y dejarlos con una textura aterciopelada y sin durezas. Para lograr su objetivo, entre sus ingredientes incluye mirra -sí, la misma sustancia que los Reyes Magos ofrecieron al Niño Jesús, y que en la antigüedad era muy usada para la elaboración de perfumes, inciensos, ungüentos y medicinas, entre otros- y caléndula, además de aceite de maní y jabón de cera de abeja.
Por último, la infaltable arma contra la celulitis, enemiga número uno de las mujeres sobre todo en la temporada en que piernas, abdomen y brazos quedan al descubierto. ¿El secreto de Weleda? Extractos vegetales de hojas jóvenes de abedul, rusco -planta que tiene propiedades vasoconstrictoras y antiinflamatorias- y romero. También incluye aceite de carozo de damasco -rico en ácidos grasos esenciales-, aceite de jojoba y gérmen de trigo.
El Aceite con Abedul busca prevenir el desarrollo de la celulitis y, en caso de que ya esté presente, mejorar el estado y la apariencia de la también llamada “piel de naranja”. Además, activa el metabolismo de la piel y facilita la circulación de líquidos.
Helena Rubinstein también recurrió a la naturaleza para incorporarla entre los ingredientes de la línea Prodigy Powercell (crema, contorno de ojos y sérum) que acaba de lanzar. En ella se utilizaron células nativas vegetales de la Crista Oceánica y extracto de emblica, todo en un completo tratamiento que promete reducir arrugas, reforzar la tonicidad, iluminar e hidratar las 24 horas.
La Crista Oceánica es una planta milenaria que proviene del fondo del mar, pero que también se ha adaptado para vivir en las costas rocosas. Gracias a su gran resistencia a las agresiones y al paso del tiempo, sus células nativas vegetales actúan sobre la piel colaborando con la regeneración celular, la reconstrucción de los tejidos orgánicos y la protección de los antirradicales libres.
El emblica, en tanto, es un árbol muy longevo cuyos frutos son una importante fuente de vitamina C, minerales y aminoácidos. Su extracto contiene moléculas activas con poderosas y demostradas propiedades antioxidantes.