NUEVA YORK. - Las tasas de aborto disminuyeron en la mayoría de los grupos de mujeres de Estados Unidos, excepto en aquellas de origen humilde donde la práctica todavía está en aumento, reveló un estudio.
El informe, publicado en la revista Obstetrics and Gynecology, llega en momentos en que los gobiernos federal y estatales de Estados Unidos comenzaron a recortar fondos que podrían limitar el acceso a servicios de planificación familiar en las mujeres de menores ingresos.
Entre los años 2000 y 2008, la tasa nacional de abortos entre las estadounidenses de 15 a 44 años disminuyó de 21 a 20 de cada 1.000 mujeres. Pero la tasa de aborto en las mujeres con menores ingresos -por debajo de la línea de pobreza- trepó de 44 a 53 de cada 1.000 en el mismo período. Ellas eran 16 de cada 100 mujeres estadounidenses de 15 a 44 años en el 2008, pero representaban 42 de cada 100 abortos.
"No nos sorprenden demasiado los hallazgos, dado que son una continuación de lo que observamos en la década de 1990", dijo Rachel Jones, del Instituto Guttmacher -una entidad benéfica con sede en Nueva York que estudia temas de salud reproductiva-, que dirigió la investigación.
La experta señaló que las razones del aumento no están claras, pero que una de ellas podría ser la recesión económica, que impactaría más en las mujeres más pobres, volviéndolas menos propensas a poder solventar un método de anticoncepción o incluso a criar un hijo.
Cualquiera sean los motivos, añadió, los resultados destacan la necesidad de prevenir más los embarazos no deseados entre las mujeres pobres. "No hemos estado mejorando la posibilidad de las mujeres pobres de acceder a servicios de planeamiento familiar. De hecho, la hemos estado complicando", dijo Jones.
El reciente acuerdo federal del presupuesto incluyó una reducción del 5,5 por ciento en la financiación de Title X, un programa nacional de 40 años de antigJuedad que ayuda a las mujeres de bajos ingresos a obtener servicios de control de natalidad entre otros, aunque no abortos, en clínicas de planeamiento familiar.
Una serie de estados han aprobado o están evaluando medidas parra recortar la financiación estatal a los servicios de planificación familiar, con el argumento de que algunas clínicas también están realizando abortos.
Los fondos públicos para la planificación familiar provienen de muchas fuentes diferentes. La mayor porción -el 71 por ciento- se obtiene de Medicaid, el programa de cobertura médica federal para pobres, indicó el Instituto Guttmacher.
El programa Title X representa alrededor del 12 por ciento. Los defensores de la salud reproductiva argumentan que Title X es una fuente vital de ingresos para muchas clínicas de planificación familiar, ya que les brinda los recursos para llegar a las mujeres de bajos ingresos. "Debemos aumentar la financiación para los servicios de planeamiento familiar, no reducirla", finalizó Jones. (Reporte de