La advertencia provino desde España, pero hoy tiene movilizada a las autoridades chilenas.
Según la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición, las mujeres embarazadas y los menores de 3 años deben abstenerse de consumir atún rojo, pez espada (bacalao) y albacora debido a las altas concentraciones de mercurio que presentan.
El problema es que esta advertencia dice relación con la contaminación de las costas españolas y se desconoce qué contaminantes, en qué cantidad y a qué productos de nuestro mar están afectando.
Según la nutrióloga de la Clínica Las Condes, Verónica Álvarez, desde hace 3 años en Chile a las mujeres embarazadas se les recomienda no consumir estos tres alimentos, pero siguiendo los parámetros que ha fijado la FDA.
La Agencia española hizo la misma prevención respecto de las acelgas y espinacas, las cuales estarían concentrando altos niveles de nitrato proveniente de los fertilizantes. Y a esto se sumarían algunos crustáceos, los cuales acumularían en su carne altos niveles de cadmio.
Según las investigaciones, el mercurio presente en los peces de aguas profundas que se alimentan de otros peces, puede producir alteraciones graves en el desarrollo neuronal del feto de los niños pequeños.
En tanto, el nitrato puede producir cianosis que es falta de oxígeno en la sangre. De ahí que no se deba incluir las acelgas y espinacas en las papillas del bebé o por lo menos que no respondan a más del 20% de los ingredientes.
El cadmio, por su parte es un metal pesado que se queda en hígado y riñones provocando problemas renales.
La doctora Álvarez señaló que en Chile se estaba en conocimiento de estas advertencias desde hace algunos años, pero como no se manejan mediciones de concentración de metales pesados en los pescados de nuestras costas deben sujetarse a las advertencias que hace la FDA.
“No sabemos cuáles son los pescados chilenos que se debieran prohibir”, dice.
Explica que lo común es prohibir los peces de aguas profundas porque presentan más mercurio que otros y efectivamente pueden ser neurotóxica y producir daño en el cerebro de los fetos. Y precisa que en la prohibición se deben incluir el atún que viene en tarro, excluyendo los calificados light.
“Ahora, es importante que las mujeres embarazadas consuman otro tipo de pescados (peces de roca) porque esta es la mejor fuente para adquirir ácidos grasos buenos, el Omega 3”, aclara la nutrióloga.
La profesional reconoció que la advertencia sobre la acelga y las espinacas es absolutamente novedosa, pero que por regla general a las embarazadas siempre se les recomienda consumir frutas y verduras lo más orgánicas posibles.
Verónica Álvarez señala que otro de los metales que provoca graves daños a la salud es el plomo y claramente estos metales pesados se pueden encontrar ya sea en fuentes alimenticias o en el medio ambiente.
Nuevas muestras al ISP
La alerta española puso en acción nuevamente a las autoridades chilenas. Según informó la directora del Instituto de Salud Pública, María Teresa Valenzuela, la próxima semana podrían conocerse los resultados de un nuevo muestreo en mariscos y pescados que se hará estos días.
La directora explica que en 2010 se hizo el último luego de que la FAO, la OMS y la Organización Panamericana de la Salud hicieran la última actualización de las instrucciones sobre los niveles de ingesta de metales por parte de los seres humanos.
A partir de ello, los Seremis de Salud, más Sernapesca hicieron un muestreo sobre 25 tipos de mariscos y 15 tipos de albacora y en todos ellos se detectó que estaban bajo la norma chilena.
“Chile tiene un reglamento sanitario sobre alimentos donde se establece los niveles de mercurio que puede haber en pescado fresco, congelado y en conserva, según la talla”, aclara.
Respecto de real peligro en Chile, María Teresa Valenzuela, apunta a que todo depende de los lugares de extracción de los pescados. “En Chile el atún proviene de Isla de Pascua baja en contaminación y además los niveles de mercurio presente están asociado a la cantidad de productos que se consuma. Nosotros tenemos una producción restringida y además su consumo es bajo ya que no es un pescado muy popular”, puntualiza.
“Este trabajo se realiza en forma silenciosa”, finaliza.