Además de descansar, la meta para muchas mujeres en el verano es lograr un bronceado fascinante y para cumplirla muchas veces pasan largas horas al sol, pero lo único que consiguen es quedar rojas como un camarón. Sin duda, nada sexy, además de que es probable que el tostado les dure unos pocos días y de regreso de sus vacaciones vuelvan a estar blancas como papel.
Si sientes que esta situación te identifica, ¡no te desesperes!, porque aún puedes obtener un color bonito y duradero. ¿Cómo? Con la ayuda del betacaroteno, un compuesto químico precursor de la vitamina A. Parece algo complicado, pero en realidad es muy fácil de encontrar.
Según explica Francisca Sánchez, dermatóloga de Clínica Alemana, el betacaroteno se deposita en el tejido adiposo de la piel, dándole a ésta un color anaranjado. Por lo general, éste compuesto se asocia con las zanahorias, pero la verdad es que hay una gran cantidad de frutas y verduras que lo contienen, como el zapallo y los damascos. Asimismo, es posible encontrarlo en verduras de hoja verde, como las espinacas o el brócoli.
Otra posibilidad es incorporarlo al organismo bajo la forma de suplemento vitamínico. Nutrapharm, por ejemplo, cuenta con Bioxantin, un complejo carotenoideo formulado a base de extracto marino que, además de ayudar al adquirir un tono bronceado, protege contra el envejecimiento ya que tiene propiedades antioxidantes.
GNC, en tanto, dispone de Beta-carotene 6, el cual, además de presentarse como modificador del tono de la piel, también se recomienda en casos de deficiencia de vitamina A y como complemento en el tratamiento de ceguera nocturna o cuando existe alguna dificultad para adaptarse a la luz.
Por su parte, Wupp Golden Sun se escapa del formato de las cápsulas y ofrece un betacaroteno bebestible. Se trata de un polvo con sabor citrus que se disuelve en medio litro de agua y se toma una vez al día. No tiene azúcar, preservantes ni colorantes artificiales, y se aconseja consumirlo durante las semanas previas a la exposición solar para preparar la piel y en forma posterior para mantener el bronceado.
A juicio de Francisca Sánchez, lo ideal es absorber el betacaroteno en forma natural a través de una alimentación completa y variada. Respecto a los suplementos, la especialista sostiene que las megadosis no son recomendables. “Lo mejor es buscar uno lo más equilibrado posible con los requerimientos diarios del organismo. Hay que recordar que las vitaminas liposolubles (A y E) se acumulan y existen efectos adversos asociados a la sobredosis”, señala.
Otro aspecto importante de tomar en cuenta -agrega la dermatóloga- es que el betacaroteno otorga a la piel un bajo grado de protección contra los rayos UV. Por esta razón, es indispensable que quienes deseen recurrir a este compuesto para lograr un bronceado más rápido, bonito y duradero, no dejen de proteger su piel con los siguientes consejos:
- Aplicar siempre un bloqueador solar sobre la piel bien seca, al menos 30 minutos antes de exponerse al sol.
- Elegir el bloqueador más indicado según su tipo de piel. Es mejor comenzar con un factor de protección alto e ir bajando de a poco, pero nunca ocupar uno menor de 15.
- Utilizar bloqueador incluso en los días nublados.
- No exponerse a los rayos solares entre las 11:00 y las 15:00 horas.
- Proteger la cabeza con gorro o sombrero, y los ojos con anteojos con filtro UV.
- Beber mucho líquido para mantener la hidratación del cuerpo.