Así es. Han pasado 56 años desde que Marlene Ahrens ganó una medalla olímpica en los Juegos de Melbourne, Australia en 1956. La recordada atleta obtuvo la plata, por su segundo lugar en el lanzamiento de la jabalina.
La marca sigue intacta pero en Londres la historia podría cambiar. ¿Por qué? De los 35 deportistas que hoy integran la selección nacional para los Juegos Olímpicos, 13 son mujeres. De ese grupo, existen cuatro deportistas de alto rendimiento que han logrado excelentes marcas, primeros lugares y numerables distinciones en los campeonatos mundiales donde han participado en el último tiempo. Solo les falta el triunfo olímpico.
Ellas son: Francisca Crovetto en Tiro al vuelo (Skeet), Denisse Van Lamoen en Tiro con Arco, Kristel Köbrich en Natación y Bárbara Riveros en Triatlón. Su esfuerzo, las ha llevado a ser calificadas como deportistas de elite y contar con apoyo ya que sus carreras son financiadas a través de becas que otorgan las alianzas de Instituto Nacional del Deporte, IND, ADO Chile y el Comité Olímpico.
“Estas condiciones permiten que existan aporte económicos directos a los deportistas para sus viajes, procesos y sustento, lo que hace posible que la actividad deportiva sea su prioridad y eso es algo que no ocurría hace algunos años”, señala Marcelo Ubal, secretario ejecutivo del Plan Olímpico de Chile.
Agrega que esto significa que muchos deportistas de alto rendimiento se pueden dedicar en forma exclusiva a sólo entrenar y competir y que en el caso de las mujeres, este escenario ha sido especialmente potenciador de talentos.
Las cifras lo demuestran. La inversión en el deporte de alto rendimiento chileno en el año 2012 bordea los 30 millones de dólares y para el año próximo se invertiría una cantidad muy similar.
Esto significa, según Ubal, que las oportunidades para hombres y mujeres son igualitarias. “No hay absolutamente ninguna diferencia”.
Más mujeres
También viajarán en julio a Londres: Érika Olivera, atletismo (maratón), Karen Gallardo, atletismo (disco), Natalia Duco, atletismo (bala), Yeny Contreras, taekwondo (57 kilos), Simona Castro, gimnasia, Berta Rodríguez, tenis de mesa, Cáterin Bravo, esgrima (espada), Natalia Romero, atletismo (maratón) y una pesista por designar.
Es decir, este 2012 van 13 mujeres y 22 hombres. Un porcentaje superior al 2008, que fueron solo 7 y 21 hombres y el 2004, 6 mujeres frente a 16 varones. Claro, todavía falta para que exista paridad de género, pero el aumento es considerable.
Para Marcela Revilloud, Pro Secretaria General del Comité Olímpico de Chile y miembro de la Comisión de mujer y deporte del COCh, piensa que existen varios factores que han influido en este repunte de las mujeres en el deporte.
“Hay más ayuda internacional y también a nivel nacional, que generan estructuras formales para el deporte. También tenemos más y mejor infraestructura deportiva, como es el caso del Centro de Entrenamiento Olímpico (CEO) del COCh, entonces todo esto hace que sea más seguro que las deportistas se dediquen a esto”, afirma.
Agrega que ha sido importante el trabajo de los entrenadores, el apoyo de las federaciones, pero sobre todo destaca la perseverancia, dedicación y la pasión con que las féminas se viven el deporte.
La tendencia parece ser mundial. En el último JJ.OO de Beijing las mujeres alcanzaron una participación del 42.3%. “Fue el mayor número en la historia de los JJ.OO. y se pretende que este año en Londres se supere esa cifra. Sin duda esto hace que las mujeres se incentiven aún mas para dedicarse al deporte”, detalla.
Tema aparte, no se aventura a decir que las mujeres son mejores deportistas que los hombres. “Son diferentes. Tanto en las ramas femeninas como las masculinas encontramos grandes deportistas, como la triatleta Bárbara Riveros y el gimnasta Tomás González, por poner un ejemplo”.
Sin embargo, constata que históricamente han existido barreras sociales y culturales para que la mujer deportista no se desarrolle como quisiera. La diferencia en la actualidad es que ellas se han concientizado en que el deporte “es un derecho para todos y todas y no sólo para un grupo de personas, ya que las instancias de apoyo hoy existen”, sostiene Marcela Revilloud.
Para conocer en detalle la historia de la participación de las mujeres en el deporte, la Comisión de Mujer y Deporte del COCh realizó una profunda investigación que da cuenta sobre su desempeño en alto rendimiento y también como dirigentes.
“Hicimos este trabajo porque queremos partir con una base sólida y científica que nos permita determinar cómo podemos ayudarlas para mejorar su práctica deportiva durante los próximos años”, puntualiza. El estudio será presentado en septiembre próximo.