"Come comida. Con moderación. Sobre todo vegetales". Ésa es la filosofía en la que se basó el periodista y escritor estadounidense Michael Pollan para escribir su libro "64 reglas para comer correctamente" y que pretende ser una guía sencilla, que pueda ser leída por cualquier persona sin necesidad de tener mayores conocimientos científicos o de nutrición.
Aunque el libro fue publicado en 2009, está plenamente vigente. De hecho, en noviembre del año pasado fue publicada una edición ilustrada por la artista Maira Kalman y en la que fueron incorporadas 19 nuevas normas.
Las reglas que entrega Pollan -también autor de otros libros sobre alimentación como "El dilema del omnívoro" o "En defensa de la comida"- apuntan a que debemos alejarnos de la dieta occidental, consistente en muchos alimentos y carnes procesadas, mucha grasa y azúcar agregada, y muchos granos refinados, entre otras características. Según el escritor, quienes consumen este tipo de comida "invariablemente sufren de altos niveles de los llamados males occidentales: obesidad, diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares y cáncer".
Muchas de las normas de Pollan están basadas en la sabiduría tradicional, mientras que otras en nociones más modernas. En cuanto a las nuevas, muchas provienen de políticas personales de los propios lectores que han encontrado útiles cuando visitan el supermercado, o bien reglas que han escuchado de sus madres o abuelas.
Sin embargo, todas refuerzan la idea de que "comer no tiene que ser tan complicado y la comida tiene que ver tanto con el placer y la comunión, como con la nutrición y la salud", según se explica en el
sitio web del autor.
A continuación te presentamos una selección de nueve de las reglas que se encuentran en el libro:
1.- "Compra en la 'periferia' de los supermercados y aléjate del centro": Según Pollan, en la mayoría de los supermercados los alimentos se distribuyen más o menos de la misma manera: los productos procesados dominan la zona central, mientras que la comida fresca se ubica en los costados. "Si te mantienes en los bordes es más probable que termines con comida real en tu carro de compras", dice el autor.
2.- "Considera la carne como comida para una ocasión especial": El periodista reconoce que la carne es un alimento nutritivo, pero llama la atención sobre la importancia que se le da en la dieta. Por ejemplo -dice-, un estadounidense come en promedio al día dos o tres comidas que contienen carne, lo que representa más de 200 gramos diarios. "Y hay evidencia de que mientras más carne haya en tu dieta, mayor es el riesgo de tener una enfermedad cardiovascular o cáncer", advierte. Por esto, Pollan propone intercambiar las porciones tradicionales, de manera que en lugar de comer un trozo de carne de 200 gramos acompañado de 100 gramos de vegetales, mejor poner en el plato 100 gramos de carne y 200 gramos de vegetales.
3.- "Comer lo que se para en una pata, es mejor que comer lo que se para en dos patas, que también es mejor que comer lo que se para en cuatro patas": A juicio del autor, éste proverbio chino resume muy bien la creencia tradicional con respecto a lo saludable que son los diferentes tipos de comidas. "Mi versión es: mientras menos patas, mejor es la carne", agrega. Si quieres ejemplos, aquí están: los vegetales se "paran" en una pata, las aves lo hacen en dos, y las vacas, cerdos y otros mamíferos en cuatro.
4.- "No pases por alto los pequeños peces aceitosos": Según Pollan, los peces salvajes son uno de los alimentos más saludables que se pueden comer, y afirma que aunque algunos han sido sobreexplotados, afortunadamente otros -los más nutritivos- han sido relativamente bien manejados y en algunos casos hasta son abundantes. "Esos pequeños peces aceitosos son una particularmente buena alternativa", recomienda.
5.- "Disfruta de las bebidas que contienen cafeína natural y no de fábrica": El periodista reconoce que los antioxidantes que hay en el café y en el té, así como en el chocolate -"que también tiene cafeína", aclara-, pueden hacernos bien. Sin embargo, también resalta que demasiada cafeína puede hacer que las personas se pongan nerviosas y ansiosas. Por esta razón, aconseja consumir la cafeína que proviene de una planta y no de una fábrica, como ocurre con la nueva generación de bebidas energéticas.
6.- "Come cuando tengas hambre, no cuando estés aburrido": Muchas personas comen por razones ajenas al hambre: por aburrimiento, para entretenerse, para consolarse o recompensarse a sí mismos. De esta manera, el autor sugiere que cada uno esté atento a la verdadera razón que está detrás del comer. "Antes de comer pregúntate a ti mismo si realmente estás hambriento", es su recomendación. Asimismo, aconseja poner en práctica el siguiente pensamiento: "si no tienes suficiente hambre como para comerte una manzana, entonces probablemente no estás hambriento".
7.- "Come toda tu comida sobre una mesa": "No, tu escritorio no es una mesa", aclara Pollan, y explica que cuando se come haciendo otra cosa (trabajando, viendo televisión, manejando, etc.), se hace sin pensar y como resultado se come mucho más de lo que se debería. "Si comemos sobre una mesa, ponemos atención a lo que estamos haciendo", afirma.
8.- "Cocina": A juicio del autor, ésta es la única manera segura de retomar el control de tu dieta y de garantizar que estás comiendo comida real.
9.- "Rompe las reglas de vez en cuando": Ésta es la última de las reglas y la favorita de Michael Pollan. "Habrá ocasiones especiales en las que querrás echar estas reglas por la ventana. Lo que importa no son las ocasiones especiales, sino que la práctica diaria", concluye.