1 kilo 200 gramos de castañas, 1 un. de cebolla, 300 cc de crema, 100 cc. de leche, ½ taza de vino blanco, 1 taza de caldo de pollo, 1 mata de ciboulette, 150 gr de queso mantecoso, 1 un baguette o 1 un marraqueta, sal, pimienta, merquén.
Cocinar las castañas a partir de agua fría a fuego fuerte hasta lograr el hervor. Luego poner a fuego bajo y cocinar por 20 minutos aprox. Dejar enfriar. Posteriormente, cortar las castañas por la mitad y con una cuchara pequeña sacarles la “pulpa”.
Freír la cebolla cortada en cuadraditos pequeños y uniformes (brunoise) en un poco de aceite, a fuego alto. Una vez dorada, agregar el vino blanco (la idea es ir sudando la cebolla con el vino) y posteriormente a fuego bajo añadir el caldo de pollo.
Teniendo la cebolla cocinada y sin crocancia, agregar la crema y la leche, luego aliñar con sal, pimienta y merquén. Estando calientes la crema y la leche agregar la “pulpa” de las castañas, revolver y dejar cocinar hasta que la mezcla alcance una consistencia cremosa. Volver a rectificar los aliños.
Cortar el baguette o marraqueta en rodajas y poner sobre ellas queso mantecoso, esparciendo encima un poco de ciboulette picado. Hornearlas a 180º, por unos tres minutos, o hasta que el queso se derrita. Servir la sopa caliente y poner encima de cada plato una rodaja de las tostadas de pan con queso derretido.