Sería muy difícil pensar en la Dolce Vita sin Federico Fellini, Marcello Mastroianni o Anita Ekberg descalza en la Fontana di Trevi... pero la verdad es que el concepto de 'La Dolce Vita' es, para los italianos, algo mucho más arraigado de esta inolvidable película.
Para los italianos "la dolce vita" es sencillamente gozar la vida, desde lo más sencillo hasta lo más sofisticado. Pero tiene un origen muy italiano: la familia, centro de la vida de todo italiano. Centro, fin y núcleo. De ahí la importancia de la mesa. De ahí la creatividad para salvarse del hambre. De ahí la compañía y la creación colectiva. Para el italiano común y corriente, ni tan galán como Mastroianni, la dolce vita es sencillamente disfrutar. Nada mejor de una bella mangiata en familia, muchas veces con poco: pasta, vino, queso, aceite de oliva y un pan, y estamos listo. ¿Acaso hay algo más?
Para gozar de la dolce vida no se requiere de productos gourmet. Compartir con los amigos, con los hijos, con los padres... En dialecto romano "A magna e a beve, e' la mejo cosa", o sea, "comer y beber en buena compañía es lo mejor".
Y los italianos, no lo olvidemos, han sabido de apreturas, de pobreza, de hambre y de falta de recursos. La Segunda Guerra Mundial golpeó muy duro al italiano trabajador, pero nunca faltó un pan, una hortaliza, una buena minestra para disfrutar y pasar las noches frías. Y en ese cariño para preparar con poco, los más grandes podían dormir tranquilos al ver a sus hijos satisfechos.
Por lo visto gozar de "la dolce vita" no es tan dificil y ni tan caro... Así que los invito a disfrutar con las cosas simples y sencillas de la vida.
Un saludo y dolce vita a tutti, Christian Zamudio, chef ristorante La Dolce Vita