WELLINGTON.- Una mujer en Nueva Zelanda murió a causa de su adicción a una famosa bebida cola, según dictaminó un juez.
De acuerdo con su familia, la mujer -que en 2010 tenía 30 años- bebía hasta diez litros diarios de la gaseosa. Hace tres años murió por una disfunción en el ritmo cardíaco. En los países anglosajones es común que sea el juez el que establezca la causa de la muerte y su dictamen se realiza tras consultar a varios expertos.
De acuerdo con el magistrado, la joven no hubiese muerto de no haber bebido tanta bebida cola. La madre de ocho hijos tenía además varios problemas de salud.
"Estamos contentos de que todo haya terminado", dijo el viudo en un video que fue publicado en el portal de noticias stuff.co.nz. "Finalmente tenemos una respuesta", agregó.
Los medios neocelandeses indican que la empresa productora de la bebida ha criticado la sentencia y que un perito contratado por la compañía ha cuestionado el dictamen.
"La seguridad de nuestros productos es para nosotros de máxima importancia", citan los medios al portavoz de la multinacional.
