Hace dos años la chef Virginia Demaria se aventuró con un libro de recetas tras llevar varios años en la televisión.
Con esa simpleza que la característica logró dar cuerpo a un texto realmente motivador: en un lenguaje cercano y fácil consigue presentar recetas que a la vista podrían aterrar a cualquiera, pero que es un hecho que le resultarán a quien se aventure.
A lo largo de ocho capítulos, que parecieran no tener relación, entrega entretenidas y sabrosas preparaciones que de verdad uno debiera llevar a la mesa. Es así como en “cuando invito a comer” las tres recetas de risotto llaman tanto la atención que es imposible no intentar por lo menos uno.
Qué decir del capítulo “de lunes a viernes” donde están esos platos típicos de cualquier hogar, pero que muchos no tienen idea como llevar a la práctica tales como el pollo arvejado o la plateada al jugo. Platos sencillos como el charquicán que toda madre o padre debiera revivir si es que los sacó de su menú semanal.
“El mundo en tu mesa” es una invitación a probar sabores distintos: kebab con hummus; pollo indio, las más cercanas papas a la huancaína o los camarones thai.
Con estas tentaciones vale la pena seguir leyendo e intentando con las recetas de capítulos como “comiendo sin culpa” (tiene un ceviche mixto oriental muy tentador); “antes de…”; “dulces placeres” (se habrán hecho la idea de cómo se hace un berlin); “para pasar el frío” (donde además de sopas están las sopaipillas) y “básicos y guarniciones” (que entrega la receta salvadora).
Esta primera obra de Virginia Demaria debiera instalarse al lado de los libros clásicos de la cocina chilena o de reconocidos chefs del circuito que han lanzado sus textos hace poco.