TOKIO. - Japón suspendió provisionalmente la recomendación de la vacuna contra el cáncer de cuello del útero debido a los dolores corporales que podría provocar, indicó este martes un comunicado del ministerio de Salud.
La decisión llega apenas dos meses después de que el ministerio lanzara un llamamiento a una vacunación generalizada de todas las adolescentes de entre 12 y 14 años.
Las jóvenes que deseen vacunarse podrán hacerlo pero el ministerio insiste en que se conozcan bien los "beneficios y riesgos antes de tomar una decisión", indicó el comunicado.
El cambio de opinión "no significa que la vacuna sea peligrosa, pero las informaciones comunicadas al público sobre los riesgos eran insuficientes", explicó un funcionario.
El ministerio indicó que, aunque todavía no se ha establecido un vínculo formal, se han señalado nuevos efectos secundarios, entre ellos dolores corporales crónicos.
"Queremos recopilar datos, incluido en el extranjero, para que los expertos puedan juzgar la frecuencia de esos dolores" y sus causas, indicó la fuente ministerial.
La observación de las dos vacunas actualmente disponibles, Gardasil (del laboratorio Merck) y Cervarix (GSK), permitió detectar efectos secundarios leves en hasta 50% de los casos y tres tipos de efectos más graves, con una frecuencia de 1 caso por cada 4,3 millones.
Las vacunas permiten prevenir el virus del papiloma humano (VPH), responsable del cáncer del cuello de útero, una enfermedad que afecta anualmente en Japón a unas 9.000 mujeres de entre 20 y 39 años. En 2011 ese cáncer provocó la muerte de 2.700 mujeres.