NUEVA YORK .— La Diet Coke, el segundo refresco de más venta en Estados Unidos, está "bajo un poco de presión" debido a la preocupación de los consumidores sobre sus ingredientes, afirmó un ejecutivo de Coca-Cola.
Durante una teleconferencia con analistas, Steve Cahillane, director de los negocios de Coca-Cola en América del Norte y América Latina, aludió así a la desconfianza de algunas personas hacia los edulcorantes artificiales en los últimos años.
Señaló que la cuestión no se enfoca sólo en la Diet Coke —conocida en otros países como Coca-Cola Light—, pues muchas bebidas y alimentos dietéticos en Estados Unidos enfrentan los mismos problemas.
"Creemos firmemente en el futuro de Diet Coke", subrayó Cahillane, señalando que la bebida sigue siendo la segunda soda de más venta en Estados Unidos, después de desplazar a Pepsi de ese puesto en 2010. La empresa sigue vendiendo el doble de Coca-Cola regular que su volumen de Diet Coke.
Cahillane subrayó que la empresa está invirtiendo dinero para promover las ventas de Diet Coke, como por ejemplo una campaña publicitaria reciente con la cantante Taylor Swift.
Desde hace varios años, organizaciones defensoras de la salud han criticado el consumo de sodas y los estadounidenses han reducido el consumo de bebidas azucaradas desde hace algún tiempo.
Sin embargo, más recientemente, las ventas de gaseosas dietéticas están cayendo a un ritmo más rápido que las sodas regulares, según Beverage Digest, una publicación especializada en esta industria.
El año pasado, por ejemplo, el volumen de ventas de Coca-Cola regular cayó un 1%, pero el de Diet Coke retrocedió un 3%. Pepsi cayó un 3,4%, mientras que Diet Pepsi perdió 6,2%. Estas cifras no pasan desapercibidas en las oficinas corporativas de Coca-Cola, en Atlanta.
En el tercer trimestre, la compañía lanzó su primer anuncio para defender la seguridad del aspartamo, el edulcorante sintético que agrega a sus bebidas dietéticas, para contrarrestar las inquietudes del público. También ha distribuido hojas informativas sobre el tema a los embotelladores y minoristas que venden productos de Coca-Cola.
La Administración de Alimentos y Medicinas de Estados Unidos (FDA) ha dicho que el aspartamo es seguro para consumo humano y que puede utilizarse en los alimentos como edulcorante.
La American Cancer Society (Asociación contra el Cáncer de Estados Unidos) ha dicho que la mayoría de los estudios a personas han encontrado que el aspartamo no tiene relación con un mayor riesgo de cáncer.
Sin embargo, la tendencia general en Estados Unidos favorece a los alimentos y bebidas que las personas perciben como naturales u orgánicos. Coca-Cola está muy consciente de ello y ha dicho que trabaja en producir bebidas elaboradas con edulcorantes bajos en calorías y naturales.
En Argentina, Coca-Cola lanzó recientemente una versión de su bebida homónima endulzada con stevia, que proviene de una planta del mismo nombre.
Mientras tanto, Coca-Cola Co. dijo que el volumen de ventas para la Coca-Cola regular, con más calorías, subió un 2% en América del Norte, según los últimos resultados trimestrales, difundidos el martes.
Las ventas de Coke Zero, que también está hecho con edulcorantes artificiales pero cuya publicidad está más dirigida hacia los hombres, aumentaron un 5%. La compañía no desglosó el desempeño de Diet Coke, pero el volumen global de soda para toda la región se mantuvo sin cambios.