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Divorciada aconseja cómo manejar el compromiso del ex marido

Sobre la base de su propia experiencia, Jackie Pilossoph entrega tips para enfrentar el momento en que tu otrora media naranja, le regala un extraordinario anillo a su nueva novia.

02 de Noviembre de 2013 | 18:16 | Emol
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Reuters
"Siempre me las arreglo para sonreír y encontrar la risa incluso en las peores situaciones". La frase es de Jackie Pilossoph, autora del blog "Divorced Girl Smiling" un espacio dedicado a brindar ayuda para que hombres y mujeres vean la separación con una luz esperanzadora y de inspiración.

Pilossoph creó su blog en 2010, tres años después de que su matrimonio llegó a su fin, y en él publica diferentes consejos para quienes se encuentran en su misma situación, entre ellos cómo manejar el compromiso del ex marido. Al respecto plantea que, aunque por lo general no importa mucho cuánto tiempo ha pasado o cuánto tiempo llevan separados, "cuando descubres que tu ex está comprometido, es una verdadera sorpresa y hay muchos sentimientos asociados a ello". Y recuerda cómo fue su propia experiencia.

"Estaba sentada en la graderías viendo el partido de básquetbol de mi hijo, feliz animándolo, cuando se me ocurrió dar una rápida mirada a su novia, quien estaba sentada junto a mi ex suegra. Su dedo anular izquierdo llamó mi atención (o quizás inconscientemente lo estaba observando) y vi un diamante enorme", cuenta.

Entonces, las preguntas repletaron la cabeza de Jackie. "¿Cuándo ocurrió esto? ¿Hace cuánto tiempo ha estado el anillo en su dedo? ¿Saben mis hijos que su padre está comprometido? ¿Estaban tratando de esconderlo de mí? ¿Cuándo sería la boda? ¿Cuándo se fueron a vivir juntos?".

Según la bloguera, ver el anillo de compromiso en el dedo de la novia de su ex, llevó a su divorcio a un nuevo nivel. Y también le sirvió para darse cuenta de que en realidad a su otrora media naranja, efectivamente le gustaba estar casado, pero sólo que no con ella.

A continuación describe que tuvo dos tipos de sentimientos. Primero mucho enojo, ya que creyó que era injusto que su ex terminara "viviendo feliz para siempre", aplicando en su nuevo matrimonio todo lo que había aprendido de los errores que tanto él como ella habían cometido en su relación.

"Fui a terapia y esto fue lo que me dijeron. A. Si él termina viviendo feliz para siempre, eso era maravilloso para mis hijos. B. Yo seguía albergando rabia de mi matrimonio que aún no había solucionado, así que me molestaba que él estuviera experimentando cualquier tipo de felicidad. En otras palabras, sentía que él no se lo merecía", cuenta Pilossoph en su blog.

El segundo sentimiento que tuvo fue el de repentina soledad, porque mientras su ex, su nueva esposa y sus hijos vivirían en una atmósfera perfecta, ella seguiría siendo una madre soltera, trabajadora y que vería a sus niños sólo cuatro veces a la semana. "Él le daría a nuestros hijos un sentido de familia, mientras yo me sentía excluida, triste de mí misma e insegura", dice.

Una mirada más positiva

En las semanas que siguieron, Jackie optó por ver lo bueno que podía haber en el hecho de que su ex marido se casara de nuevo y comenzó a sentirse así:

1.- Lo que él estaba haciendo era perfectamente aceptable y normal. "Mientras su matrimonio afectaría a mis hijos y a mí de manera indirecta, su nueva vida sería para él una experiencia, en la cual yo ni siquiera tenía que pensar", reflexionó.

2.- Al menos le agradaba la mujer que se casaría con su ex marido, al igual que a sus hijos. "Eso es enorme. Podría haber sido un gran desastre", pensó.

3.- Si él estaba feliz con su nueva vida, quizás su relación de ex esposo mejoraría.

Sin embargo, según Pilossoph lo más importante para ella fue darse cuenta de que, aunque se sentía sola, no lo estaba. Tenía a su familia, a sus amigos y también a una nueva pareja, a quien sentía como su familia a pesar de no estar casados.

Así, su conclusión de todo el proceso fue la siguiente: "Por el bien de mis hijos, incluso por bien de mi ex, espero que termine feliz en su nuevo matrimonio por el resto de su vida. Puedo decir honestamente que eso es lo que siento. ¿Por qué? Porque si amaste a alguien lo suficiente como para casarte con él, debes sentirte bien cuando esa persona encuentre la felicidad. Toma tiempo, por supuesto, pero si de pronto te ves así, probablemente tienes una vida que realmente te hace feliz. ¿No es eso lo que todos queremos?".
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