PARÍS.- El 43 % de los franceses admite haber sido infiel al menos una vez a lo largo de su vida, según un estudio del instituto Ifop publicado y encargado por el portal especializado en encuentros extraconyugales "Gleeden".
El sondeo muestra que algo más de la mitad de los hombres (un 55 %) ha sido infiel alguna vez, al igual que un tercio (32 %) de las mujeres. La encuesta demuestra que los casos de adulterio han crecido de manera considerable en Francia durante los últimos 40 años.
El 1970, el porcentaje de población infiel era del 19 por ciento, mientras que en 2001 había crecido ya hasta el 30 %. Además, casi la mitad de los franceses (46 %) reconoce haber besado a otra persona que no era su pareja, y uno de cada dos afirma haber participado en "juegos de seducción" fuera del matrimonio.
En lo referente a las fantasías, tres de cada cuatro hombres y dos de cada tres mujeres afirman haber "soñado que hacen el amor" con alguien distinto a su pareja.
El número de personas que admite haber sido engañada por su cónyuge alcanza el 53 por ciento entre las mujeres y el 45 por ciento entre los hombres.
El estudio de Ifop también ofrece datos relacionados con la orientación política de los adúlteros. Así, la infidelidad es ligeramente más habitual entre los votantes de izquierda (46 %) que entre los que apoyan a la derecha (40 %).
Por otra parte, más de la mitad de la población considera que intercambiar "mensajes picantes" es una forma de infidelidad. Pese al repunte que esta práctica ha experimentado en el país, un 68 % de los franceses cree que todavía es posible ser fiel a una persona durante toda la vida, frente al 53 % que lo creía en 2010.
El estudio precisa que si bien cada vez más personas se dejan llevar por la tentación de una aventura fuera de la vida en pareja, la infidelidad sigue sin ser aceptada socialmente, una postura mucho más acusada entre la población femenina que entre la masculina, más propensa a tolerar este tipo de conductas.