NUEVA YORK. - Las mujeres que toman anticonceptivos orales desean distintas características en un hombre imaginario que las que no utilizan ese método, según revela un estudio de Italia.
Aún se desconoce si eso se traduce en cómo eligen en el mundo real, pero con más de 60 millones de consumidoras de la píldora en el mundo, los autores consideran que vale la pena indagar en la posibilidad de que cambie esa dinámica.
"Es importante analizar esto desde el punto de vista de la evolución, ya que los cambios en las preferencias de los indicadores de calidad genética en una pareja sexual son funcionales y adaptativos", dijo el autor principal,Alessio Gori, psicólogo de la Universidad de Florencia.
El equipo reunió a 195 mujeres de entre 18 y 50 años del centro de Italia para responder un cuestionario de 20 preguntas, con una escala de cinco puntos, sobre sus preferencias en varios indicadores de masculinidad, como la cualidad atlética, el nivel social y el ancho de hombros.
Además, respondieron 56 preguntas del Inventario Multifásico de Personalidad de Minnesota 2, que es un test de personalidad, para conocer lo masculinas o "sumisas" que se consideraban.
El 39 por ciento de las mujeres tomaba la píldora. Cien estaban entre los días 11 y 21 del ciclo menstrual, que es cuando ocurre la ovulación y las mujeres están más fértiles.
El equipo de Gori observó que, durante esos días más fértiles, las mujeres que no tomaban la píldora obtenían valores significativamente más altos en los cuestionarios que indagaban sus preferencias masculinas en un hombre imaginario.
Las usuarias de la píldora obtuvieron 59 puntos, respecto los 73 puntos de las que no usaban ese método. Eso quiere decir que el segundo grupo prefería a los hombres con características físicas y psíquicas más masculinas.
Al comparar las respuestas con los autopercepción de masculinidad, el equipo halló que las mujeres con personalidades más femeninas y sumisas preferían los atributos más masculinos en un hombre imaginario, utilizaran o no la píldora.
Aun así, y hasta en ese grupo más femenino, las consumidoras de la píldora obtuvieron un resultado mucho más bajo que el resto en sus preferencias de las características masculinas, según publica el equipo en Journal of Sexual Medicine.
Para Christine Drea, bióloga evolucionista de Duke University, en Carolina del Norte, los resultados son intrigantes. Pero dijo: "Me pregunto si las fantasías de una mujer sobre la persona con la que quiere tener relaciones sexuales son necesariamente predictivas del hombre real con el que convive", dijo Drea, quien no participó del estudio.
"¿Las hormonas modifican las fantasías femeninas? Claro", pero dijo que se desconoce si realmente anticipan conductas.