Hasta el próximo 16 de agosto, el teatro "Herald" de Auckland (Nueva Zelanda) estará presentando MAMIL, una obra en la que Mark Hadlow interpreta a Bryan Cook, un hombre que trabaja en el mercado inmobiliario y ha logrado acumular una pequeña fortuna, pero que -por otro lado- está estresado, se auto medica y no está satisfecho consigo mismo, entre otras cosas.
Sin embargo, cuando la crisis financiera le arruina su negocio, el personaje se une a un grupo de ciclistas para aliviar el estrés y mejorar su salud. Así, Cook se convierte en un MAMIL o middle aged man in lycra (hombre de mediana edad en lycra), como se le denomina a aquellos hombres que motivados por alguna u otra razón, han desempolvado su antigua bicicleta pistera para lucirla los sábados y domingos paseando en grupo por diferentes rutas, tal como el protagonista de la obra neozelandesa. De hecho, para interpretar a Bryan Cook, Mark Hadlow se basó en la experiencia que vivió durante 2011 con un grupo de ciclistas, y que le sirvió para darse cuenta de que las conversaciones que mantenían no eran las típicas machistas sobre sexo y deportes, sino que eran más emocionales, como las relaciones de pareja o los problemas de salud.
Este tipo de MAMILs se conocen desde 2010, luego de que la empresa de estudios de mercado Mintel los caracterizara como aquellos hombres en sus 30 o 40, con un poder adquisitivo suficiente como para comprar bicicletas fabricadas a medida y que su valor asciende a varios miles de libras.
Para algunos es una imagen un poco patética y aseguran que quienes lo hacen es para enfrentar la crisis de la mediana edad, como antes otros lo hacían con los autos deportivos. Pero Matt Seaton, actual editor de opinión de "The New York Times" y un MAMIL propiamente tal, los defiende.
"Como un miembro de estos nobles 'guerreros de fin de semana', debo objetar y hablar a favor de los MAMIL. Primero, a medida de que la crisis de la mediana edad avanza, ¿cuán benigno es esto? Lo peor de todo es que molestas a tu pareja porque quieres comer pasta y acostarte temprano el sábado (…) Te pones en forma; tus piernas se ponen firmes y bien formadas; pierdes algunas libras, ¿es eso tan terrible?", se pregunta en una columna que publicó en "The Guardian" el antiguo periódico donde trabajaba. A sus argumentos además agregó que no se trata de una actividad autoindulgente, que implique abuso de sustancias o infidelidad.
Así, según Seaton los MAMILs quizás son un poco ridículos, pero no idiotas. "La sociedad puede etiquetarnos y burlarse de nosotros (…) Pero para mí, las burlas se deslizan fuera de mis lycras. Soy un hombre de mediana edad en lycra y estoy orgulloso", concluyó.
Mucho músculo
Pero los MAMILs no son sólo estos cuarentones que se convierten en ciclistas los fines de semana, sino que en el último tiempo también fueron incluidos en esta categoría los hombres de entre 35 y 40 años que están obsesionados con el gimnasio y con usar lycras para ejercitarse.
Según una encuesta realizada por la compañía de suplementos deportivos Bodybuilding Warehouse a 2.000 personas que se ejercitan con regularidad, el grupo de hombres sobre 40 años que se ha dedicado al fisicoculturismo es el que ha experimentado un mayor crecimiento en los últimos 12 meses. Y a la hora de preguntarles la razón, la mayoría indica que es una forma de enfrentar el alza de peso que ocurre a la mediana edad y también de mejorar la salud a largo plazo.
Asimismo, los MAMILs se inspirarían en actores con cuerpos muy trabajados y marcados, y de edades que rondan los 40 años, como Hugh Jackman, Dwayne Johnson -apodado "La Roca"-, Matt Damon e incluso Liam Neeson, que ya tiene más de 60.
"Es genial ver que los hombres de 40 y más no están viendo su edad como una excusa para bajar la velocidad, sino que como una motivación extra para cuidar de su condición física y bienestar general", sostuvo un portavoz de Bodybuilding Warehouse, quien agregó:
"Hacer ejercicio cuatro veces a la semana o más es una excelente forma de mantener la salud, prevenir el aumento de peso de la mediana edad y mantener una actitud mental positiva".
Algo en lo que Rich Sturla -especialista en salud, transformación psíquica y acondicionamiento deportivo- coincidió, en declaraciones al periódico británico "Daily Mail". "Los beneficios son de gran alcance y tienen un respaldo inequívoco de la ciencia", aseguró.
Según Sturla, que los hombres mayores de 40 practiquen ejercicio con regularidad, tiene cuatro principales beneficios:
1.- Aumenta el deseo sexual, la actividad y la satisfacción.
2.- Mejora la energía, fuerza y resistencia.
3.- Reduce el estrés y la ansiedad.
4.- Reduce el riesgo a padecer males serios y potencialmente mortales, como enfermedades cardíacas, hipertensión, osteoporosis, diabetes, obesidad, colesterol alto, cáncer de colon, derrame cerebral, ataque al corazón y artritis.