Psicólogo crea el ‘manifiesto de liberación afectiva masculina’

 “No es tan sencillo ser, al mismo tiempo, fuerte y frágil, seguro y dependiente, rudo y tierno, ambicioso y desprendido, eficiente y tranquilo, agresivo y respetuoso, trabajador y casero”, afirma el conocido psicólogo italiano Walter Riso en su libro “Lo que toda mujer debe saber acerca de los hombres” (Planeta).

Un libro con un título dedicado a la mujer, pero que debiera ser leído por todo hombre que esté reflexionando acerca de su afectividad, su manera de ser y preguntarse si: ¿Realmente son el sexo fuerte? ¿Por qué se subestima el sufrimiento masculino? ¿Hay una nueva masculinidad en gestación?

Es que Walter Riso cree que estamos frente a una masculinidad tonta, superficial y potencialmente suicida, que ya no se ajusta a los tiempos actuales, porque el arquetipo y lo que “debe ser” un hombre ha sido demasiado idealizado.

Como consecuencia, asegura, estaría afectando las relaciones familiares y de pareja, y en los hombres, causando un sentimiento de frustración permanente, “no damos en el clavo”.

Y no se refiere a los típicos machistas, sino que a aquellos que aman de manera honesta y respetuosa, pero que no han podido desarrollar su potencial humano masculino por miedo o simple ignorancia.

“Ese que teme llorar, sufre por conseguir el sustento, no es capaz de desfallecer, abrazar y besar a su hijos, el que se auto exige exageradamente, el que ha perdido el derecho a la intimidad y que debe mostrarse inteligente y poderoso para ser respetado y amado”, los define.

A su parecer, los hombres han cambiado y hoy sienten miedo, no soportan la soledad, les agobia la idea del fracaso y temen llorar para no ser considerados homosexuales.

Ellos quieren más

Walter Riso también es consciente que al hacer referencia a la insatisfacción masculina, algunas voces femeninas se alzarán y cuestionarán “¿y acaso nosotras no sufrimos? Nadie lo niega”, se defiende.

Simplemente, su objetivo es explicar en detalle la evolución emocional que han ido teniendo los hombres, y desterrar esas ideas gastadas de ser el sexo fuerte, que no saben amar, que no lloran, que no sienten. Por eso afirma, que no es que se quiera más, sino que “queremos menos”.

“Desde la perspectiva de la nueva masculinidad, las pretendidas reivindicaciones y ganancias del poder masculino machista son un verdadero encarte”, señala.

¿Y qué propone? Un nuevo varón acorde a un despertar espiritual, que desea menos capacidad de trabajo, más afecto, más acercamiento con sus hijos y más derecho al ocio.

“Uno que ya no quiere estar aferrado a los viejos valores centralistas que fundamentan la sociedad patricarcal”, proclama. En ese sentido, se abandera hacia una revolución masculina que conquiste la libertad interior y se desprenda de las antiguas señales ficticias de seguridad.

“La idea no es suprimir nuestras raíces ni reprimir las expresiones naturales que surgen de las mismas, sino cortar aquellos lastres disfuncionales que nos impiden alcanzar una nueva existencia”, argumenta.

Esto sería como una invitación a soltar la mente de tanto complejo de superioridad y dejar salir al antihéroe personal. “Me refiero sencilla y llanamente al varón normal, despojado de todo atributo sobrenatural y sin más carga que su propia identidad”, define.

Para desplegar su propuesta analiza por capítulos, los miedos masculinos, sus conflictos emocionales y cómo viven la sexualidad. Es que para Walter Riso, especialista en terapia cognitiva y bioética, es urgente que surja una nueva manera de vivir el amor y la sexualidad, más digna y más humana, que respete los derechos de la mujer.

La propuesta, que desarrolla en este libro, “Lo que toda mujer debe saber acerca de los hombres”, busca en definitiva, potenciar y desarrollar relaciones afectivas más sanas y honestas entre los hombres con la mujer, los hijos y los demás hombres.

Su manifiesto

Según Walter Riso es necesario plantear cierta reivindicaciones de libertad emocional masculina, que resume en este “Manifiesto de Liberación Afectiva Masculina”, escrito para todos aquellos que están hartos de la represión emocional en la que han vivido culturalmente y también a la autoimpuesta, y desean liberarse “de”:

1. A sentir miedo.
2. A ser débiles y a pedir ayuda cuando así lo consideremos.
3. A ser inútiles, a cometer errores y a no saber qué hacer.
4. A fracasar económicamente, a ser pobres y a experimentar el ocio intensa y vitalmente.
5. A vivir en paz, a negarnos a la agresión, a la guerra y a todo tipo de violencia interna y externa.
6. A emocionarnos y a expresar nuestros sentimientos positivos, ya sea física o verbalmente.
7. A estar más tiempo en familia y a participar en la crianza de nuestros hijos.
8. A comunicarnos efectivamente con los demás hombres, y a fomentar la amistad masculina sin rivalizar ni competir.
9. A disfrutar del sexo sin ser adictos sexuales.
10. A fallar como reproductores y a no transmitir el apellido.
11. A una sexualidad más afectiva y amorosa.
12. A intentar ser fieles.