Como ofensivas, inapropiadas, pero efectivas califica Julien Blanc las "tácticas" que enseña a otros hombres para que logren captar la atención de las mujeres más atractivas, para que éstas rueguen por tener sexo con ellos. Y, según revela en su
página web, son técnicas que él mismo ha probado que son exitosas.
"No era un chico popular y eso apestaba. Pero eso en realidad no me molestaba, hasta que un día estaba buscando en el blog de música de Jim Adkins y encontré un enlace a 'The Game'", explica. Éste último es un libro escrito por Neil Strauss, que fue publicado en 2005 y que narra de forma vivencial cómo es ser parte de una comunidad de seducción.
Así, Blanc decidió probar los métodos de los que hablaba el texto, pero no logró buenos resultados, por lo que continuó con su búsqueda y luego de aproximadamente seis meses de aprendizaje, consiguió involucrarse con una mujer.
"Desde ese momento decidí llevarlo al siguiente nivel. Me fui a vivir a Los Angeles y endurecí mi juego más que nunca, hasta que logré los resultados que quería", afirma, y muestra una serie de fotografías en las que aparece con diferentes mujeres.
Recibió entrenamiento durante dos años, para luego convertirse en coach y enseñarles a "literalmente miles de clientes cómo conquistar a las mujeres más atractivas en los lugares más difíciles", a través de conferencias cuyas entradas tienen valores que van entre 117 mil y casi 300 mil pesos.
El problema es que las "tácticas" de seducción de Julien Blanc comenzaron a ser cuestionadas, ya que muchos las consideran una forma de promover la violencia y el abuso emocional de las mujeres. Y la molestia tuvo sus efectos, ya que a comienzos de noviembre las autoridades australianas le revocaron la Visa antes de que realizara un seminario en Melbourne y luego el Ministerio del Interior de Gran Bretaña le prohibió la entrada al país, donde tenía programado un seminario para el 21 de noviembre.
Polémica cartillaLa reputación de este suizo-estadounidense, que a estas alturas es apodado el "hombre más odiado del mundo", empeoró aún más cuando el fin de semana pasado publicó en su cuenta de Twitter la imagen de una cartilla que originalmente fue creada para prevenir la violencia doméstica, pero que él lanzó con el hashtag #HowToMakeHerStay. Si bien, las recomendaciones están orientadas a ayudar a las mujeres a identificar cuándo están siendo abusadas, Blanc las apunta como estrategias masculinas para retener a una mujer.
Las polémicas técnicas se dividen en ocho áreas (uso de la intimidación; abuso emocional; aislamiento; negar, culpar y minimizar; uso de los niños; uso de los privilegios masculinos; abuso económico; uso de la coerción y las amenazas), con consejos directos como hazla sentir miedo, humíllala, controla lo que hace, dile que es ella la que causa los problemas, usa a los niños para dejarle mensajes, trátala como una sirvienta, no la dejes trabajar y amenázala con que la vas a dejar o cometerás suicidio.
A esto se suman varios videos de sus seminarios en los que aboga e incluso demuestra sus métodos para seducir, que incluyen tomar a las mujeres por el cuello y poner sus cabezas en su entrepierna. "Al menos en Tokio, si eres un hombre blanco, puedes hacer lo que quieras", aparece diciendo en uno de ellos, según han publicado diversos medios que cuestionan que ese tipo de recomendaciones sean consejos de citas, como él asegura que son.
En una
entrevista con CNN, Julien Blanc ofreció disculpas y dijo que nunca quiso ofender a nadie. "Me siento pésimo (...) Estoy impresionado por la forma en que la gente está respondiendo", señaló.
Asimismo, el coach explicó que su objetivo es enseñar a los hombres a "ganar confianza" con las mujeres y aseguró que de hecho ha ayudado a algunos a conocer a sus futuras esposas.
En relación a la polémica cartilla que publicó en su cuenta de Twitter, afirmó que no era un componente de su enseñanza y que se arrepentía de haberla publicado.
Le preguntamos a la coaching de amor Cristina Vasconez su opinión sobre el estilo de Julien Blanc y fue categórica en afirmar que lo que él hace "se acerca más al adoctrinamiento, ya que alecciona sobre un comportamiento surgido de su propia visión, de manera repudiable y en sí, denostando también el valor de sus entrenados". En este sentido, lo comparó con el alemán Joseph Goebbels,"cuyo propósito lo asoció a generar un retroceso humano, actitudes nocivas y de cero valor".
Vasconez aclara que "el coaching es una disciplina que se basa en asistir a las personas en sus búsquedas personales. Se asienta en la escucha efectiva para poner en relieve los factores que les impiden complementar sus logros". Es decir -agrega-, "tiene que ver con los deseos y posibilidades de quien consulta, no con los del coach".
Bajo esta perspectiva, destaca los muchos casos de verdaderos coach tales como Tony Robbins o Louise Hay, "y también los tantos que en Chile de manera constructiva, amorosa y respetuosa acompañamos a las personas en sus caminos a la plenitud".
