El verano se acerca a pasos agigantados, y la preocupación por el peso y por cómo lograr una buena figura para el traje de baño se transforma en una verdadera obsesión. Es así como muchos comienzan a establecer una relación "insana" con la pesa, que incluso los lleva a identificarla como un "enemigo".
¿Cuándo hay que comenzar a preocuparse? Según Catalina Girardi, psicóloga de
Clínica Estétika Médica, un signo de que la relación con la pesa se ha transformado en algo "enfermizo" es cuando el tema de los kilos de más se convierte en una obsesión, que impide a la persona disfrutar de todo aquello que tenga que ver con la comida.
"Es importante que si la conducta de pesarse genera más ansiedad y ésta se traduce en comer o, muy por el contrario restringirse 100% en lo que come, es mejor dejar que el doctor que está acompañando la dieta se preocupe del peso en los controles", sostiene.
Aunque la psicóloga no es partidaria de esconder la pesa que se tiene en casa, sí afirma que quienes son muy ansiosas o se obsesionan fácilmente con las cosas, deberían evitar usar esos aparatos todos los días. No así quienes ven en la balanza una ayuda para llevar un control de sus cambios.
"Lo importante es tener en consideración la historia personal y única. Ello será el mejor indicador para decirnos si pesarnos todos los días será beneficioso o perjudicial para nuestro peso", dice.
Qué hacer y qué noPor su parte, la doctora Ximena Soto de Clínica Estétika Médica considera el peso como "una medida un tanto rudimentaria para determinar si una persona está gorda o flaca". Esto porque -explica- sólo se trata de un número que no entrega información sobre otros factores importantes a tomar en cuenta, como la masa grasa y magra, la cantidad de agua que hay en el cuerpo, etc.
"Lo que importa, en el fondo, es cuánta masa grasa tiene una persona, eso es lo que indica obesidad, no es tanto el peso. Y eso es en lo que la gente no se fija: siempre quiere llegar a un peso, pero lo que se debería desear es llegar a cierto porcentaje de masa grasa (…) Lo que importa es la composición corporal", destaca.
Es por esto que Ximena Soto insiste en la importancia de asesorarse por un especialista que pueda realizar esas mediciones. "Es lo que está pasando mucho ahora, que la gente llega y toma cualquier dieta de internet, y se rigen por eso y no es lo más sano", resalta.
Pero, ¿cómo lograr que la relación con la pesa sea "saludable"? La doctora entrega los siguientes consejos:
1.- Ten en cuenta que existe un peso más o menos estable en el tiempo y uno que fluctúa durante el día: Ximena Soto explica que esto se debe a diversos factores, entre ellos la tendencia a retener líquidos y la lentitud o velocidad del tránsito intestinal. Así,
en un día puede haber una variación de entre 100 gramos y un kilo, algo que debe ser especialmente considerado por las mujeres, sobre todo en los períodos menstruales cuando la retención de líquidos aumenta. "Pero es un asunto que se debe ver con un especialista, porque no es bueno tomar diuréticos sin indicación médica, que es algo que mucha gente hace", advierte.
2.- Pésate siempre a la misma hora: la doctora sostiene que los ideal es que sea
en la mañana y en ayunas. "Ahí se tendrá una referencia para ir comparando y ver si realmente la variación de peso es de grasa o no", indica.
3.- Evita pesarte todos los días: esto porque así como el peso varía durante el día, también puede hacerlo durante la semana, entonces un aumento de 300 gramos para algunos puede transformarse en una pesadilla. "A mis pacientes les recomiendo que se pesen con el especialista y se olviden de la pesa de la casa (…) Las bajas de peso nunca son lineales, son más escalonadas, entonces
hay días en que no se baja nada y eso es normal", dice la doctora. ¿Y qué ocurre con quienes hacen dieta por su cuenta? Ximena Soto le aconseja pesarse una vez a la semana o incluso cada 15 días. ¡Y nunca varias veces al día! "Eso es una lesera, es enfermarse de la cabeza", enfatiza.
4.- Si tiendes a mantener un peso más o menos estable, súbete a la balanza sólo de vez en cuando: con una vez al mes o cada dos meses es suficiente, señala. Eso sí, recalca que hay que considerar que
el peso también varía a lo largo de la vida, sobre todo en las mujeres. "Una mujer no va a pesar lo mismo a los 20 años que cuando llega a la menopausia, es normal que aumente un poco el peso", dice como ejemplo.
5.- Lleva un registro: si tu afán es bajar los kilos que te sobran, es
bueno anotar las mediciones, "porque si vas bien y estás bajando, es algo que motiva y demuestra que estás haciendo las cosas en forma correcta". Pero ¡ojo!, porque también puede transformarse en un arma de doble filo, ya que si el registro refleja un aumento de peso, esto puede provocar rabia, desilusión y frustración, entre otros sentimientos. Según Ximena Soto, esto es frecuente en los casos de quienes ingresan a gimnasios. "Empiezan a formar más músculo y eso pesa más que la grasa, entonces creen que no han bajado nada de peso. Y eso no es tan así, porque están con más masa muscular que reemplaza a la masa grasa y eso es lo importante, porque es lo que los va a proteger en adelante para tener un peso saludable, una buena salud, etc.", explica.
6.- No te peses inmediatamente después de realizar un ejercicio de alta intensidad: los deportes como spinning, trote o zumba producen mucha pérdida de líquido, por lo que si una persona se pesa inmediatamente después de practicarlos,
la balanza reflejará un baja de peso "irreal". "Va a pesar menos pero porque perdió agua. Para perder grasa con ejercicio, éste tiene que ser prolongado más que intenso. En realidad, la clave para bajar de peso es la dieta más que el ejercicio. Éste ayuda a mantener el peso que se baja", señala.
7.- Establece una meta realista y que puedas mantener en el tiempo: es importante
no buscar ideales que salen en las revistas o los que muestran las modelos, sino que aquel saludable para cada persona. Esto significa acudir a un especialista que indique cuál debe ser el
peso sano, cómo llegar a él con una dieta equilibrada, ejercicio físico y cambiando hábitos. "No tiene sentido bajar 30 kilos si a los dos meses se tienen 15 kilos encima de nuevo", dice Ximena Soto.