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Loreto Arellano: Los tips que las mujeres deben seguir al decidir su look

Esta asesora de imagen asegura que las mujeres deben desoír los consejos de las vendedoras y escuchar a sus hijas. Agrega que nunca hay que salir a comprar cuando se está deprimida y que todas, hasta las modelos, tienen algo que ocultar.

18 de Diciembre de 2014 | 08:29 | Por María José Errázuriz L.
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Es directa, pero empática, o sea, lo que una necesita. También clara en los consejos que da y que, al escucharlos, nos develan las múltiples trampas que nos ponemos las mujeres cuando evaluamos nuestra propia imagen y debemos resolver qué vestir o cómo maquillarnos.

La verdad es que todas la quisieran al lado después de comprender la lógica de sus afirmaciones. De ahí que más de alguna reconocerá pura verdad en sus dichos, especialmente, en algunos que son clarificadores como que las mujeres deben alejarse de los malls cuando están con rabia o deprimidas, porque siempre, siempre toman malas decisiones en sus compras. O que debemos pedir la hora más temprana con el peluquero, porque a las 5 de la tarde, cuando éste esté cansado después de tantas horas de pie, su trabajo no tendrá la dedicación esperada.

Loreto Arellano, ingeniera comercial, siempre quiso trabajar en el mundo de la cosmética, específicamente Lancome, y resuelta golpeó las puertas de su representante en Chile y se introdujo en un mundo que le permitió, años después, ser la product manager que lanzó acá la esperada marca MAC.

Tras nueve años en ello, resolvió reinverntarse y partió -con el impulso de su marido e hijos- a estudiar asesoría de imagen en Barcelona. Hoy está nuevamente de vuelta en el mercado de la cosmética, pero en paralelo presta sus servicios como asesora a través de Imagen a tu Medida.

“He sido súper afortunada. Siempre me ha gustado trabajar con la magia de la autoestima de las personas, poder ver cómo con algo tan simple como el maquillaje las mujeres se sentían felices, aunque se gastaran una fortuna”, explica.

-¿Por qué derivar en asesoría de imagen?
“Porque soy una convencida de que todas las mujeres tenemos algo que ocultar y algo que destacar, todas. Es fuerte escuchar a una mujer que dice que no le gusta nada de ella y eso implica trabajar para que se descubra y pueda valorarse”.

-Por lo que dices, imposible no cuestionarse si la publicidad no ha dañado a las mujeres.
“Sí, es cierto eso, pero también la mujer vive en un mundo donde se le exige ser tan perfecta que se ponen ellas en la última prioridad. Primero está el trabajo, los hijos, el marido, la casa, el jardín y al final, nosotras. Así nos vestimos con lo primero que encontramos”.

-Cuando dices que todas tenemos algo que ocultar, sería bueno recordar que eso incluye a las modelos.
“Sí, pero además, se nos olvida que las modelos no son modelos toda la vida. Todas éramos regias y estupendas a los 18 años, y después fuimos mamás y a todas nos quedó el estómago flácido o sumamos celulitis. Las modelos se jubilan, pero no lo asumimos”.

-Bombardeadas por el mundo de la moda, la cosmética, las cirugías, la vida de las mujeres no es fácil.
“Es un bombardeo que dentro de un límite la ayuda porque la impulsa a conocerse. Cuando una mujer se conoce bien a sí misma, sabe lo que necesita, le es fácil desenvolverse en este mundo, de lo contrario, obviamente, se sentirá bombardeada y lo verá como bullying. Cuando se enfrentan a la moda, al final, sin saber lo que necesitan, todas terminan vestidas de negro o igual que la amiga”.

-Si pusiéramos a la chilena dentro del espejo, ¿cómo la describirías?
“La mujer de hoy es más informada que hace 15 años, que se atreve con el color, pero más en el maquillaje que en la ropa, donde son tradicionales. No es segura y se deja llevar mucho por la opinión del resto. Todas saben lo que le queda bien en su interior, lo que tiene o no que usar, y mi consejo es que ninguna debiera salir a la calle con algo que no la hace sentir una reina”.

-¿Cuáles son los consejos que se deben desoír? ¿La madre, las hijas?
“Se debe desoír el de la vendedora de la tienda y la de la amiga que te acompañó, pero que tiene otra agenda, quiere comprar lo de ella. Las hijas por lo general, dan buenos consejos y las madres, lo hacen en la dirección correcta, pero son muy duras. Ellas nunca darán un mal consejo, pero podrán fallar en el tacto o tino”.

-¿Y la pareja? ¿Se sienten sumamente enjuiciadas por ellas?
“Es que una nunca le quiere hacer caso. Cuando una le pregunta al marido por qué vestido se pone y él contesta ‘cualquiera’, la razón es porque él sabe que cualquier cosa que diga será usada en su contra”.

-¿Cuáles son las principales debilidades que muestran las chilenas?
“Sobrecargarse en accesorios, maquillaje. A mayor edad, menor maquillaje de color se debe poner, no así en tratamientos. También está el no respetar las líneas del cuerpo, porque muchas tratan de verse acinturadas y se meten en una faja y modelan el cuerpo de una forma que no corresponde. Se termina incómoda”.

-¿La moda tiene que ser cómoda? Hay zapatos que uno no debiera ponerse.
“La moda debe ser cómoda. Es verdad que lo que se ve en pasarela muchas veces no lo es, pero porque busca marcar tendencias y que ciertos zapatos los usarían sólo las ‘drag queens’, porque con tacones de 25 cms. es imposible caminar sin terminar en la clínica. Las que lo hacen es para el cóctel o estar sentadas como las modelos. Nadie que trabaje todo el día los usará. La ropa no debe quedar apretada, sólo ceñida”.

-¿Ahora, somos víctimas de la moda?
“Sí, y eso se debe a que no nos conocemos bien, que compramos lo que nos dicen que tenemos que adquirir. Tom Ford dice que la moda es un patrón, pero que si sabes lo que te queda bien, debes persistir en eso. Punto”.

Loreto explica que las mujeres deben adoptar algunas cosas que están de moda como el color del año (el 2015 será el marsala) o algún accesorio, pero nunca vestirse de pie a cabeza siguiéndola porque no habrá presupuesto que lo resista.

Agrega que las grandes inversiones deben estar en tres elementos: abrigo, zapatos y carteras porque son las que duran más. “Deben ser de la mejor calidad que se pueda pagar ya que dan la primera impresión”.

-¿Nos equivocamos cuando pensamos que nuestra imagen pasa por la ropa solamente?
“Sí, porque pasa por el lenguaje corporal, los gestos; el cabello y su cuidado; el maquillaje y la moderación con la edad; y los accesorios. Es como cuando se ve a un hombre con un terno top y un lápiz rasca que hace ruido. Si algo hace ruido, desconcentra y llama la atención a eso”.

-¿Las chilenas son compradoras compulsivas?
“Sí, claramente, es cosa de ver cuántas prendas tienen en el closet con la etiqueta puesta”.

-¿Y la misma polera en todos los colores?
“Eso está perfecto si es el modelo que te queda bien y es un básico, porque se juega con los accesorios. Es como cuando descubres el modelo de jeans que te queda perfecto… si es así, no cambies, sigue comprándolo siempre ahí”.

-¿Cuántas veces se debe ordenar el closet?
“Con cada cambio de temporada se debe sacar todo y hacer tres montones: lo que me queda bien, lo que está en buen estado y se puede arreglar y lo que se debe regalar. La memoria es súper frágil y no se acuerda que tiene la polera roja y al año siguiente la compra. Por eso, es bueno tener una lista, porque a uno se le olvida lo que va guardando y al final, no ocupa.
“Si la talla ya no te queda por 10 años, también hay que regalarla. Sólo hay que guardar los clásicos de muy buena calidad”.

-¿En qué momento debe llegar a la vida de una mujer una asesora de imagen?
“Depende mucho de la etapa de vida. Algunas se los regalan para el cumpleaños, otras lo requieren cuando tienen un ascenso laboral y quieren pulir su estilo. Es algo muy personal, aunque es verdad que algunas necesitan un fashion emergency urgente”.
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