Se hicieron famosas porque salieron al mercado como una competencia a las flemáticas Barbies.
Las conocidas muñecas Bratz, producidas por Micro-Games America Entertainment, hicieron de las suyas debido a su particular maquillaje, extremadamente recargado especialmente en ojos y labios.
Su imagen resultó mucho más atractiva para niñas debido a que eran más seductoras que las barbies, hasta que fueron destronadas por las Monster High.
Sin embargo, una artista australiana quiso poner a esta muñeca en su justa dimensión y resolvió intervenir una decena de éstas, tanto quitándoles el maquillaje, como cambiándoles la ropa.
Así, sin lujosas y brillosas tenidas y sin labios extremadamente marcados y exuberantes, las muñecas Bratz se acercan más a la realidad diaria de las niñas pequeñas.
“Estas muñecas se han rescatado y rehabilitado de tiendas alrededor de Tasmania (Australia). Estas muñecas de moda han optado por una ‘renovación’, intercambiando el glamour y el brillo por un estilo con los pies en la tierra”, señala la artista en su sitio web.
Todo el experimento se encuentra graficado en el sitio
Tree Change Dolls y puede ser un buen ejercicio mostrarle a las niñas la realidad de estas singulares muñecas.