Fotografía publicada en la web de Municipalidad de Rancagua.
El viernes 13 de marzo falleció el joven Víctor Baeza, que a sus 35 años pesaba sólo 23 kilos, y cuya situación puso en la palestra esta oculta enfermedad que padecen los hombres en silencio.
Su drama se conoció en el verano de 2014, cuando las autoridades locales lo visitaron para darle su apoyo. El joven quería conocer al cantante Marcos Llunas, deseo que se concretó cuando estuvo internado en el Hospital Regional de Rancagua.
El joven, oriundo de Graneros padecía anorexia nerviosa, una enfermedad que sufren también los hombres y cuya cifra ha crecido sostenidamente en los últimos años.
Las estadísticas mundiales hablan de que por cada 10 mujeres que sufren anorexia hay un varón que también la presenta. La tasa de mortalidad es cercana al 10'%.
Diversos estudios y publicaciones médicas revelan que uno de los mayores problemas de la anorexia masculina es que estos casos pasan inadvertidos porque se estima que no es una enfermedad que pueda afectar a los hombres, considerado el sexo fuerte.
La anorexia es vinculada a problemas de autoestima profunda en mujeres que se declaran disconformes con su apariencia física y que tienen sus primeros signos durante la adolescencia. Pero la patología es mucho más profunda que eso, multifactorial, y en los hombres también hay una distorsión de la imagen personal.
En enero del año pasado el joven pidió a través de los medios de comunicación ayuda, porque no había podido acceder a un tratamiento especializado que le permitiera vencer la enfermedad, específicamente, un psiquiatra.
Según señaló hoy a Emol Eduardo Baeza, el hermano de Víctor, éste estuvo internado algunos meses en el hospital de Graneros, hasta que en noviembre fue derivado a su casa porque “los médicos dijeron que era un caso perdido”.
Hace algunos días debió regresar al centro asistencial porque su madre no tenía los medios para cuidarlo y falleció.
“Cuando son casos así los dan como perdidos y se tiene que tomar más conciencia de estos casos porque no son muchos y no se les considera”, dijo Eduardo.