Existe, en estos últimos tiempos, una maravillosa tendencia por explorar nuestro yo más profundo. Todo nace de la concepción de este nuevo ser, capacitado con la flexibilidad que se requiere y se espera, para poder enfrentar los cambios vertiginosos que estamos viviendo y los que se avecinan.
La búsqueda, sin embargo es infructuosa si se realiza desde el exterior, pues dentro de nosotros, conviviendo con todo un cúmulo de paradigmas ancestrales se encuentra nuestro espacio más creativo, la raíz de todo nuestro poder como seres vibrantes, material genético que se mezcla con una llama divina que vive en nuestro pecho llamada el alma.
El alma de cada individuo es única y al mismo tiempo participante de un todo creativo, el Universo.
Es ahí donde ponemos en marcha la concepción de nuestros sueños, que junto a los paradigmas que vamos cargando se transforma en nuestra identidad.
Es por eso que se vuelve inmensamente importante el trabajar desde la infancia en construir una identidad de seguridad, autonomía y entusiasmo por vivir en este mundo bueno y bello.
La información que llega a manos, oídos y ojos de nuestros niños es trascendental en esta formación. La percepción de cada niño puede modificar, para su beneficio o para su perjuicio, la clase de vida que llevará.
La identidad está regida por el país, la educación el nivel socioeconómico, la religión o política de cada familia, que llevará por la misma senda a sus hijos. Sin embargo ahora tenemos una herramienta que podemos usar para que nuestro hijo descubra su real potencial, su autonomía y se sienta responsable de su vida, descubriendo todas sus capacidades a desarrollar.
La idea es evitar la presión, y más que nada despertar en el niño la inquietud por aprender. Devolverle nuestra fe.
Esa herramienta es el coaching infantil, que iremos ejercitando semana a semana para que redescubras a tu propio niño interior y desde ahí puedas sanar esa relación con tu hijo o hija.
Como padres es muy difícil y triste verlos sufrir, sin saber cómo podemos ayudarlos, y el problema consiste en que no contamos con las técnicas y herramientas necesarias para hacerlo. Este quiebre en la comunicación hace que surjan emociones de intolerancia entre ambas partes, pues el dolor de no poder encontrarse les provocará el rechazo que se hará vívido en el periodo de la adolescencia.
La PNL o programación neurolingüística, presenta un atractivo programa de evolución continua que iremos presentando para ustedes, con alto contenido en técnicas aplicables en casa, donde podrás tratar el TDAH, mal comportamiento, complejos de inferioridad, tartamudez, obesidad, enuresis nocturna (pipí en la cama) , entre otros.
Aprovecha esta gran oportunidad de convertirte en el mejor coach de tus hijos y tu familia, pues aprenderás y realizarás las técnicas con una cuota muy especial del poder más grande de la historia, el amor.
Saludos
Patricia Valenzuela, coach e Instructora de PNL, autora de "Coaching Para Niños Felices", y única sudamericana invitada a participar de "La Cumbre de la Prosperidad" que se realiza este fin de semana en Miami, Estados Unidos.
Mayor información en www.patyvalenzuela.com.
