"Uno de los temores del hombre moderno es el de no estar a la última", aseguró Pascal Monfort.
EFE
PARÍS.- La imagen del hombre siguiendo a la mujer mientras ella recorre todas las tiendas, arrastrado o sepultado bajo las bolsas, ha pasado a la historia. Los hombres ya no ven las compras como una obligación y muchos hasta le encuentran el gusto. "El hombre reacio a ir de compras es una especie en vías de extinción y esto es ya incluso una actividad donde los jóvenes adultos y, aún más los adolescentes, rivalizan con las chicas", explicó Pascal Monfort, profesor de sociología de la moda.
"El hombre elige por sí mismo. Antes era la mujer la que hacía las compras por él y ahora él las hace solo", confirmó el estilista Lucien Pellat Finet que abría el miércoles los desfiles de moda masculina en París.
Los estudios confirman la tendencia. Uno de ellos, realizado en octubre por la consultora especializada en hábitos de consumo CCM Benchmark para la web de ropa ChicTypes, muestra que los hombres entre 25 y 35 años gastan más dinero en compras -415 dólares al año de media ($260 mil pesos)- que las mujeres -405 dólares ($256 mil)-.
Otra encuesta significativa, el Observatorio de Shopping elaborado por Unibail-Rodamco e Ipsos, reveló el año pasado que ir de compras es un momento de placer para más de uno de cada dos hombres.
Cada vez más preocupados por su aspecto y seguros ahora de que su interés por la ropa no mermará su lado "masculino", los hombres hacen esfuerzos por cuidarse, ir a la moda y encontrar un estilo personal. "Los homosexuales han sido los precursores al trivializar lo que antes estaba mal visto, e incluso era tabú entre los hombres: la cosmética, la condición física o el cuidado de su aspecto", explicó Gérald Cohen, autor de "La moda como observatorio del mundo que cambia".
"Uno de los temores del hombre moderno es el de no estar a la última. Tiene miedo de que sus hijos le consideren anticuado a pesar de que su estilo se acerca cada vez más al de ellos", aseguró Pascal Monfort.
Compras personalizadas
Ávidos de información y de asesoramiento, los hombres pueden acudir a las tiendas especializadas, pero también a las páginas web de venta y otros blogs de moda masculinos que, desde hace decenios, han proliferado en la red.
En Francia, una decena de estas webs, como "Comme un camion", "Bonne gueule" o "Jamais vulgaire", se consideran referencias capaces de tener un impacto en la imagen de una marca, incluso en sus ventas.
"Estas páginas han entendido a la perfección las necesidades específicas de los hombres que, mucho más que las mujeres, aprecian tener una guía para tomar sus decisiones", declaró Pascal Monfort. "También, aparte de ropa, les dan recomendaciones para combinar un par de zapatos con un traje o una camisa con una corbata", añadió.
Para ofrecer este servicio de "personal shopping", algunas webs utilizan algoritmos que seleccionan los artículos susceptibles de corresponder con los gustos del cliente. Otras recurren a verdaderos asesores que responden a las preguntas en línea.
Pero si la rapidez y la eficacia de estas páginas son particularmente apreciadas por la clientela masculina, los hombres tampoco desdeñan la idea de frecuentar las boutiques, sobre todo si son especializadas. "Están cada vez más informados y a veces saben más que algunos vendedores", señaló Geoffrey Bruyère, cofundador de "Bonnegueule.fr", que recibió dos millones de visitas en 2014. "Tienen un interés creciente por tocar los tejidos, por tener un contacto con el producto", añadió. Una tendencia que ha llevado al equipo de la web a abrir, hace algunos días, una tienda tradicional en el barrio parisino del Marais.
"Aplicamos el principio de 'web-to-store' que consiste en poder informarse en línea sobre un producto, su disponibilidad, su precio y tener la opinión de otros consumidores antes de ir a comprarlo a la tienda", precisó Geoffrey Bruyère.