Yuto Onishi habló de su caso con el programa "7.30" de la ABC australiana.
Abc.net.au
Se aíslan de la sociedad, se encierran en sus piezas, en las casas de sus padres, para dormir todo el día y despertar por las noches para navegar por internet y leer manga, y esta rutina puede durar hasta años. Estas son las características “Hikikomori”, una especia de crisis social que afecta a casi un millón de japoneses, lo que tiene a médicos nipones preocupados de que esto no afecte a las próximas generaciones.
Uno de ellos es el doctor Takahiro Kato, quien tras haber sufrido en carne propia un episodio como éste, decidió profundizar en el tema y hoy, junto con un grupo de expertos de la Universidad Kyushu, en Fukuoka, han podido ver casos tan graves, como hombres de 50 años, que se han aislado de la sociedad por tres décadas.
Dado que este estado suele afectar a hombres, después de graduarse de la universidad, el doctor señala que podría significar un golpe a la economía japonesa, por lo que es necesario tomar medidas urgentes para evitar nuevos jóvenes “hikikomori” en el futuro.
“Algunos se han graduado de universidades muy famosas, así que es una historia triste para ellos”, señaló al Daily Mail Australia. Asimismo, explicó que en la sociedad japonesa los jóvenes sienten mucha presión de sus familias, por los logros que deben alcanzar en sus carreras, sobre todo cuando se trata de la clase media. Esto, sumado a padres sobreprotectores, han creado el ambiente propicio para que se desarrolle este mal.
“Me sentía seguro así”
Yuto Onishi, de 18 años, conversó con la cadena ABC acerca de cómo y por qué pasó tres años de su vida encerrado en su pieza, sin querer salir ni relacionarse con gente que no fuera su familia más cercana.
Según explicó el joven de Tokio, su período de crisis fue gatillado, luego de sentir que había fallado como líder durante su educación media. “Una vez que lo experimentas, pierdes la noción de realidad (…) Sabía que era anormal (encerrarme así) pero no quería cambiar. Me sentía a salvo así”, declaró.