VARSOVIA.- El presidente de la Conferencia Episcopal de Polonia, el arzobispo Stanislaw Gadecki, pidió hoy al Presidente del país, Bronislaw Komorowski, que no ratifique el proyecto de ley que incluye la fecundación in vitro en la salud pública y la hace extensiva a las parejas de hecho.
La norma,
que fue aprobada por el Parlamento y el Senado, está a la espera de ser firmada por el jefe del Estado polaco antes de entrar en vigor.
Komorowski, quien perdió las elecciones del pasado mes de mayo, cederá formalmente la presidencia de Polonia a principios de este mes de agosto al ganador en esos comicios, el nacionalista-conservador Andrzej Duda, quien, como la Iglesia, está en contra de regularizar la fecundación in vitro.
De esta forma Komorowski cuenta con apenas unos días para ratificar la norma antes de abandonar la jefatura del Estado.
En una carta abierta hecha pública hoy, el arzobispo Gadecki le pide que "reflexione como cristiano" antes de firmar el proyecto y recuerda que para la Iglesia la fecundación in vitro y la manipulación de embriones son contrarias a la "protección absoluta de la vida humana".
Este método de fecundación cuenta también con la oposición de los sectores más conservadores de la sociedad polaca, incluyendo el partido Ley y Justicia de Andrzej Duda.
Al aprobarse la norma en el Senado, un parlamentario de esa formación aseguró que la nueva ley supondrá "abrir las puertas del infierno".
Polonia ya permite la fecundación in vitro en clínicas privadas, aunque este método está hasta el momento apenas regulado.
Según el proyecto, que crea el marco jurídico para incluir esta práctica de reproducción asistida en la salud pública, las parejas casadas y de hecho podrán acudir a la fecundación in vitro si en el plazo de un año otros tratamientos no dan resultado.
Una pareja puede tener hasta un máximo de seis óvulos fecundados y aquellos que no sean utilizados pueden ofrecerse a otras mujeres después de 20 años, pero no ser destruidos.
