Quedan pocos días para celebrar Fiestas Patrias, y los chilenos ya tenemos en mente asados, empanadas, terremotos, vinos, pebre, pan amasado y muchísimos otros platos típicos que suelen saborearse especialmente en estas fechas.
Sin embargo, es demasiado fácil caer en excesos y terminar los festejos con incómodos problemas gástricos, que a veces pueden llegar a convertirse en una intoxicación grave u otro problema de salud más complicado.
"El desorden de la alimentación aumenta en estas fechas, por lo que aumenta también la consulta en urgencias de hospitales y clínicas, además de la descompensación de diabéticos e hipertensos en fechas posteriores por la misma causa", dice Claudia Rojas, nutricionista y académica de la Universidad Andrés Bello (UNAB).
Según la profesional, el exceso de alcohol y consumo de productos de alto contenido graso puede provocar pancreatitis, que es una inflamación del páncreas de carácter súbito o agudo. "Se trata de un dolor abdominal que puede comprometer la vida del paciente, aunque generalmente, el páncreas regresa a su estado normal. Los síntomas más recurrentes son dolor abdominal -que puede extenderse hacia la espalda o el tórax-, náuseas, vómitos, fiebre, aceleración del pulso, inflamación de la parte superior del abdomen, disminución de la presión sanguínea e ictericia", explica.
Además, un elemento muy frecuente en estas fechas es el aumento de peso producto del consumo de alimentos altos en calorías. La nutricionista asegura que se puede llegar a subir desde dos hasta cinco kilos, dependiendo si es hombre o mujer, los que después pueden ser difíciles de eliminar.
Para evitar que las consecuencias de los excesos arruinen una fecha que debería ser de celebración, Claudia Rojas entrega algunas recomendaciones, aunque destaca que la principal es "no comer todo lo que nos ofrecen".
1.- Tomar un desayuno liviano: té con leche descremada y endulzante; 1 o 2 rebanadas de pan de molde light integral con agregados bajos en calorías, como pechuga de pavo asada, quesillo o mermelada sin azúcar.
2.- A media mañana comer una fruta: idealmente kiwi, naranja o manzana por el aporte de fibra, cuyo consumo disminuye en esta fecha.
3.- Elegir entre un choripán (de pavo o pollo) o una empanada de horno mediana.
4.- Preferir el pebre ante la mayonesa.
5.- Evitar bebidas azucaradas y consumir bebidas light o jugos naturales sin pulpa con endulzante.
6.- Beber vino o cerveza, que tienen menos calorías, en vez de destilados. Consumir un máximo de dos vasos.
7.- Como plato de fondo elegir carnes con menos grasas, mejor aún si es una pechuga de pollo o pavo, con ensaladas de hojas.
8.- Para el postre la sugerencia es papayas al jugo (que ayuda a acelerar o mejorar la digestión), chirimoyas o frutillas.
9.- Los dulces chilenos, como el alfajor o empolvado, se deben dejar como entremés o a la hora de la once.
10.- Caminar más de 30 minutos o hacer una actividad rutinaria de ejercicios de una hora para equilibrar el gasto calórico con la ingesta.
Por su parte, Bárbara Flores, jefa del departamento de nutrición de Edenred -empresa que entrega beneficios para los trabajadores, con especialización en el rubro de alimentación laboral-, entrega otras dos sugerencias:
11.- Hidratarse y cumplir con la recomendación de beber, al menos, entre 1,5 y 2 litros de agua al día.
12.- Bailar sin parar: la cueca quema 236 calorías, la cumbia 175, el reggaetón 230 y la salsa 215.