"Mantener una relación no es cosa para dejar al azar. Es un trabajo más en nuestras vidas", asegura Uribarri.
APMe he desayunado con la publicación de los resultados de una encuesta británica realizada para Warner Brothers, en la que se traslucen las principales razones por las que las relaciones se enfrían y desaparece la pasión. Corrí a leerla y me sorprendí con los motivos que llevan al fin a una relación: el aumento de peso o la falta de ejercicio; los problemas económicos; los horarios de trabajo, los tiempos con los familiares; la diferencia en los hábitos higiénicos y la falta de romance.
Y me quedé pensando en que según lo que oigo frecuentemente en mi círculo cercano y por mi experiencia, solo algunos de éstos hacen que una pareja deje de tener sexo; pero la mayoría generalmente, provocan conflictos en la pareja, más que fin de la pasión.
Y es que para mí, la pasión también pasa por un tema químico. Nos excita el olor del otro, las hormonas que expele, el movimiento… Si al fin y al cabo, la pasión no es más que un instinto casi animal. Sin embargo, en relaciones a largo plazo, este instinto también va ligado a la conexión emocional que exista entre uno y el otro; este último punto, clave cuando nace el primer hijo.
Según un estudio realizado por el sicólogo John M. Goyyman y Nan Silver, el 67% de las parejas sufre una abrupta caída en la satisfacción matrimonial cuando son padres por primera vez. Y solo el 16% del 33 restante, vive una mejora. ¿Qué hizo este último grupo para lograrlo? Tenían un detallado mapa de amor que los protegió de la revuelta. ¿Y a qué me refiero con el mapa del amor? A que cada uno mantiene informado al otro de sus sentimientos y emociones, y que existe una costumbre de transmitirse lo que se piensa y que han logrado un profundo conocimiento del otro. Cada uno está en contacto con las actividades favoritas del otro, con los deportes que practica, con sus hobbies; pero también está conectado con sus miedos, preocupaciones, temores y deseos.
Este proceso, arduo y consciente, es tan importante para que una pareja se mantenga unida bajo cualquier huracán; que se hace indispensable vivirlo desde el primer momento. Conocer el mapa del amor es una tarea ineludible para cada dupla que quiera trazar un camino sólido y a largo plazo.
Siéntate un rato y pregúntate qué tanto sabes de tu compañero actualmente y viceversa. ¿Conoces sus sueños vitales?, ¿conoces sus creencias e ideas religiosas?, ¿conoces su filosofía de vida?, ¿sabes cuáles son las tensiones a las que él se enfrenta actualmente?, ¿sabes cuáles son los tres momentos más especiales en su vida?, ¿sabes qué música le gusta?, ¿sabes qué opina de sus parientes?
Mantener una relación no es cosa para dejar al azar. Es un trabajo más en nuestras vidas. Con otro sabor, pero un trabajo. Por lo mismo, no se debe descansar en el fortalecimiento de sus bases, pues son éstas las que te ayudarán a entrelazar las manos con tu pareja frente a las dificultades, las diferencias e incluso ante las mayores turbulencias.
Saludos,
Karen Uribarri, periodista Diplomada en Sexualidad y SexBlogger.