El Mercurio (imagen referencial)
NAIROBI.- Los niños serán más propensos a sobrevivir a la tuberculosis (TB), la enfermedad infecciosa más mortífera del mundo, cuando estén disponibles a partir del próximo año medicinas con sabor a frutilla y frambuesa diseñadas especialmente para ellos, dijeron expertos el miércoles.
La tuberculosis causó la muerte de 140.000 niños y 1,37 millones de adultos el año pasado e infectó a más de 1 millón de niños, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Pero una falta de incentivos de mercado ha dificultado el desarrollo de medicamentos pediátricos, dijo el grupo activista TB Alliance.
Muchos niños con tuberculosis no completan su tratamiento porque tienen que tomar medicinas con sabor amargo todos los días durante al menos seis meses. La dosis es con frecuencia imprecisa ya que los padres deben cortar y deshacer medicamentos con tamaño para adultos.
Desde principio del 2016, estarán disponibles dosis pediátricas solubles de los tres medicamentos principales usados para tratar la tuberculosis.
"Así, el niño simplemente estará tomando una bebida con sabor a fruta", dijo el presidente ejecutivo de TB Alliance, Mel Spigelman, a la Fundación Thomson Reuters. "Hará más fácil para un padre o tutor asegurarse de que el niño tome el tratamiento y lo haga religiosamente por el tiempo debido", agregó.
Cuando pacientes con tuberculosis no completan su tratamiento se enferman de nuevo, con frecuencia con cepas de "superbacterias" resistentes a los medicamentos que se están extendiendo rápidamente por todo el mundo.
La tuberculosis se contagia por una bacteria cuando alguien con la enfermedad sin tratar, con frecuencia un familiar, tose o estornuda. Los niños que sobreviven pueden quedar ciegos, sordos, paralizados o mentalmente incapacitados.
Casi 10 millones de personas se infectaron con tuberculosis en el 2014 y 1,5 millones murieron, superando los 1,2 millones de fallecimientos por VIH/sida, según la OMS. Aunque la mayoría de los nuevos casos de TB ocurren en el sureste de Asia, África tiene la mayor proporción respecto de su población.
"La tuberculosis siempre está concentrada entre los más pobres de los pobres" ya que se propaga en lugares con malas condiciones de salubridad y nutrición, dijo Spigelman. "La tuberculosis es una enfermedad increíblemente desatendida (...) probablemente la enfermedad de la pobreza por excelencia", agregó.
Y como los pobres no pueden pagar las medicinas, no tiene sentido para las compañías farmacéuticas desarrollar remedios para tratar enfermedades como la tuberculosis, añadió. Los nuevos fármacos pediátricos para la TB están financiados en gran parte por Naciones Unidas.