Aquí, una de las cosas que me ha llamado mucho la atención es la decoración. Todo se ve demasiado lindo de noche. Las casas y calles iluminadas, con renos, trineos y "Papa Noel" (porque sabrán ustedes que Chile es el único país del mundo que hablamos del Viejito Pascuero, ¿de dónde habrá salido ese nombre?)...
En la cena de Navidad el pavo siempre está presente en las mesas peruanas, tal como cada vez pasa más en en Chile. Pero, incluso más allá de la comida, aquí en realidad el infaltable en estas fechas es el chocolate caliente. Sí, es en serio. Es increíble cómo lo consumen, todas las fiestas y reuniones de fin de año son con este líquido delicioso, sedoso, cremoso, suave y delicado: "un brebaje de los dioses".
Una frase que no resulta exagerada si recordamos que eran los mismísimos incas los que tomaban chocolate caliente (aunque no todos si no que sólo los jefes de la alta alcurnia).
Es en serio...:
"¿Alguien sabe por qué acá le pusimos "Viejito Pascuero"?
El cacao lo obtienen de la selva amazónica peruana, siendo el Perú un importante productor en América Latina, además de exhibir una calidad excepcional. De hecho, este año el “Cacaosuyo” ganó el premio al mejor chocolate de leche del mundo, superando a los famosos chocolates suizos.
Así que en esta Navidad, siga la tradición y tome de desayuno este maravilloso chocolate caliente que les dejo. Espero que les guste, a mi me fascina y lo mejor de todo es que uno lo puede condimentar con canela o peperonchino o cardamomo y así le damos el toque que queramos. Si queremos ser más gringos, le ponemos marshmellows arriba.
Saludos y muy felices fiestas
Receta 4 personas- 300 gramos de chocolate.
- 1 litro de leche.
- 1 rama de canela.
- 1/4 de unidad de peperonchino.
- 1 pizca de sal de maras.
- Marshmellows para la decoración (a mis niños les fascina).
Preparación
Hervir la leche con la canela y el peperonchino, cuando esté empezando a hervir, se apaga y se cuela. Se coloca en un jarro con la barra de chocolate que se va a derretir con el calor de la leche. Se revuelve bien y se sirve en tazones con una pizca de sal de maras encima y (sólo si queremos copiar los gustos más "gringos") añadimos unos marshmellows flotando. ¡Una delicia!
Y si esperan sus regalos, déjele un tazón a "Papa Noel" (OK, al Viejito Pascuero) en la noche del 24, jojojo.
¡FELIZ NAVIDAD!
María José Palma
Instagram: @merycocina
