SANTIAGO.- La ausencia de drogas efectivas para combatir el mal de Alzheimer hacen que la opción de una alimentación balanceada sea "una potencial cura para mitigar sus efectos y desarrollo", según la opinión de científicos de la Universidad de Cincinnati. La enfermedad ha crecido más de un 500% en Chile durante los últimos 12 años y se considera un mal propio de los países desarrollados.
El Alzheimer y otros tipos de demencia afectan a más de 800 mil personas en Gran Bretaña, en tanto que en Chile es la quinta causa de muerte, siendo considerada una enfermedad muy costosa.
Se define como una enfermedad mental progresiva, que se caracteriza por una degeneración de las células nerviosas del cerebro y que se manifiesta a través de la pérdida de memoria, además del deterioro intelectual y personal.
Los expertos piden poner énfasis en el desarrollo nutricional para combatir el mal, luego de años de búsqueda sin resultados de fármacos costosos que no arrojan efectos concretos.
Dentro de estas nuevas investigaciones basadas en el desarrollo nutricional de adultos de entre 40 y 50 años, se postula al arándano como potencial aplacador de la demencia.
El investigador de la Universidad de Cincinnati, Robert Krikorian, estudió a 47 hombres y mujeres de más de 68 años diagnosticados con deterioro cognitivo.
En el marco del estudio, a un grupo se le dio arándanos congelados y a otro un polvo que pretendía funcionar como placebo, esto durante un período de cuatro meses.
Los voluntarios fueron puestos a prueba mediante exámenes enfocados en el desarrollo de la memoria e inteligencia a largo plazo, con resultados positivos en el aumento de sus capacidades cognitivas entre quienes consumieron la fruta según señaló el diario inglés "The Guardian".
"Existe un aumento importante en el desarrollo de las funciones cognitivas de aquellos que comieron arándanos a diferencia de los sujetos que tomaron el placebo", sostuvo el científico. Los scanners también mostraron una mayor actividad cerebral en los primeros.
Los científicos creen que la antocianina -químico responsable del color de las frutas- causa los efectos mitigadores de enfermedades degenerativas.
Se considera a los arándanos como actores del cerebro que aumentan el flujo sanguíneo, cortan la inflamación y facilitan el paso de información entre células.
Personas que comenzaron a tener problemas de memoria sin presentar síntomas de demencia, también vieron potenciada su capacidad de recordar gracias al consumo de arándanos.
Chile es el mayor productor de arándanos del hemisferio sur y se considera un buen antioxidante, desinfectante y antibiótico. Sin embargo, la desinformación respecto a sus propiedades y sus altos precios hacen que sea de bajo consumo en el país.