Missing Persons of America
SANTIAGO.- Durante el día recorría las calles de Roma y por la noche dormía en una plaza ubicada en el centro de la capital italiana. Rubia, de ojos azules y capaz de hablar en perfecto inglés, "María" -como le dijo a la policía que se llamaba- sin duda llamaba la atención.
"Es muy tímida (...) Estaba sucia, pero se veía como una normal niña 'burguesa' para mí (...) La forma en la que actúa da a entender que algo muy malo le pasó", señaló Adriano Banchetti, el dueño de una tienda de ropa deportiva cercana a la Piazza della Torretta, donde la joven solía pasar el tiempo.
"María" fue interrogada por la policía italiana, a la que dijo ser de origen británico. Los agentes llegaron a pensar que podía tratarse de la mismísima Madeleine McCann, la niña que desapareció en 2007 cuando estaba de vacaciones con sus padres en Praia da Luz, Portugal. Sin embargo, la posibilidad fue descartada, ya que la pequeña hoy tendría 13 años y "María" se veía bastante mayor.
"Cuando le preguntamos por qué estaba en Italia, ella simplemente dijo que había dejado a su familia en Gran Bretaña", relató un vocero de la policía italiana al "Daily Mail".
Tal era el misterio que rodeaba a "María", que su caso incluso salió en un programa de la televisión italiana. Sin embargo, fue una fotografía publicada en Facebook la que finalmente ayudó a dar con su verdadera identidad.
Preocupada por la joven, Lorena Kollobani subió imágenes de "María" a la red social con la esperanza de que alguien la reconociera. "No sé si es estadounidense. La he visto en las calles de Roma. Duerme afuera y creo que tiene problemas mentales", escribió la mujer.
Kollobani agregó en su post que al parecer "María" no siempre había vivido de esa manera, porque cuando le ofrecían dinero, ella lo rechazaba. "Creo que es una estudiante extranjera porque no sabe hablar italiano", añadió.
Las fotografías de la joven se viralizaron y llegaron hasta Tahvo Jauhojärvi, un padre sueco que desde hacía seis meses buscaba a su hija desaparecida.
"¡Es mi niña!", declaró Jauhojärvi al medio británico, revelando que su verdadero nombre es Embla, tiene 21 años y sufre de síndrome de Asperger.
"Ha estado perdida por seis meses desde mayo. Sabía que iría a Italia para estudiar italiano", explicó el hombre. Sin embargo, al dejar Suecia, Jauhojärvi perdió contacto con su hija y aunque le pidió ayuda a la policía de su país, no logró nada ya que la joven ya es una adulta.
Inmediatamente después de conocer el paradero de su hija, Jauhojärvi se contactó con la policía italiana y viajó al país mediterráneo para reencontrarse con su hija. Sin embargo, la reunión no fue como esperaba.
"Ella quiere regresar a vivir en la calle. No quiere volver a su hogar", señaló Jauhojärvi, y agregó: "No puedo dejar que vuelva a dormir afuera y pida comida".
Sin embargo, Embla es mayor de edad y sus padres no pueden obligarla a viajar con ellos a Suecia. Así que, por el momento, están de manos atadas.
