Hasta hace unos años este pequeño archipiélago no estaba en los mapas de los turistas. No obstante, sus belleza natural y su fuerte carga histórica han hecho que Malta tome fuerza y hoy sea considerado como un excelente destino para los viajeros del todo el mundo.
Ubicada en medio del mar Mediterráneo esta república está frente a la costa sur de Italia, al oriente de Túnez y al norte de Libia. Precisamente esta situación geográfica la llevó a ser constantemente blanco de las potencias en el transcurso de los siglos, hecho que ahora se ve reflejado en su arquitectura, historia y expresiones culturales.
Como si esto fuera poco su entorno natural es simplemente generoso y da la posibilidad de pasar los días en completa tranquilidad y relajo tomando baños de sol en sus bellísimas playas o bien realizar una amplia variedad de deportes, especialmente acuáticos, o aventurarse en entretenidas excursiones. Así lo han entendido los turistas europeos que cada vez más escogen este lugar como su destino estival.
En COCHA confirman esta situación y aseguran que “este pequeño país europeo ofrece más de una razón para ser visitado. En Malta se puede disfrutar de las más variadas atracciones, ya que cuenta con lugares históricos muy bien cuidados, playas perfectas para disfrutar del verano mediterráneo, además de tener un rico fondo marino”, explican.
"En Malta se puede disfrutar de las más variadas atracciones, ya que cuenta con lugares históricos muy bien cuidados, playas perfectas para disfrutar del verano mediterráneo, además de tener un rico fondo marino"
COCHA
Agregan, por ejemplo, que es un destino ideal para los amantes del buceo ya que sus costas han sido posicionadas entre las más espectaculares del mundo para esta disciplina. Esta recomendación también va para quienes gustan de realizar actividades outdoor ya que las islas que forman el archipiélago -Malta, Gozo y Comino; además de otros tantos islotes como Filfla y de Cominotto- tienen una geografía ideal para el trekking, escalada y ciclismo.
Consejos para la primera visita
Quienes han vivido la experiencia aseguran que llegar a estas tierras es como retroceder en el tiempo y eso se comprueba al apreciar su arquitectura y recorrer sus pintorescos pueblos.
El primer destino debe ser La Valeta, capital de Malta y Patrimonio Mundial de la Unesco. Esta urbe ofrece bellas y empinadas callejuelas que te invitan a caminar por el casco antiguo para llegar a la Concatedral de San Juan donde se encuentra la famosa obra de Caravaggio La decapitación de San Juan Bautista.
También se aconseja visitar los Jardines Altos de Barrakka. Este lugar es el paraíso para los amantes de la fotografía y desde aquí se puede apreciar el Gran Puerto y las “Tres Ciudades” que son Senglea, Cospicua y Vittoriosa. Esta última aún conserva la belleza en sus iglesias, paseos y callejuelas empedradas a pesar de haber sido blanco de fuertes bombardeos durante la Segunda Guerra Mundial.
Imperdible debe ser también recorrer las ciudades amuralladas de Mdina y Rabat. Ambas son asentamientos legendarios de Malta donde se aprecia la bella arquitectura medieval y barroca. La primera sorprende por su hermoso pórtico que recibe a los turistas que luego recorrerán sus entramadas callejuelas y palacios. En tanto, Rabat ofrece conventos, monasterios e iglesias como consecuencia de la influencia cristiana. También se puede visitar la Casa Romana Domus, las Catacumbas y la Gruta de San Pablo donde se cree que vivió el apóstol tras un naufragio.
En el puerto de Cirkewwa se pueden tomar los ferrys que van hacia la isla de Gozo, la segunda más grande del archipiélago tras Malta y donde se cultiva cerca del 80% de los productos agrícolas del país.
En esta isla se encuentra la ciudadela Vittoriosa donde se recomienda degustar el pastizzi, un plato típico de la zona y que no es otra cosa que una empanada rellena de queso ricota o guisantes. Acá también se puede visitar la zona de Dwejra donde se halla la llamada “Ventana Azul” y que es un arco de roca de unos 20 metros de altura que ha sido tallado solo por el viento y el mar.
