Definitivamente Barcelona es una ciudad maravillosa que logra tener de todo para satisfacer las necesidades de quienes la visitan. Basta con caminar algunos minutos por la Rambla o algunas de sus calles cercanas para encontrarse con actividades para jóvenes, mayores, familias con niños, parejas, solteros, grupos de amigos e incluso para quienes llegan por trabajo.
Demás está hablar del famoso Parque Güell, La Sagrada Familia, las casas de Gaudí, el Barrio Gótico o el mismísimo Camp Nou. Si ya conoció todo eso, la propuesta es disfrutar de sus mercados y la increíble oferta culinaria que en ellos se puede encontrar.
La ciudad catalana tiene más de 40 centros de abasto y recorrerlos es adentrarse en una experiencia donde se puede disfrutar de un ambiente vivo y alegre en un entorno donde se mezclan las vocerías de los vendedores y el rito del día a día. Tan solo esta ciudad tiene 39 mercados de alimentación y 4 de otras temáticas, lo que asegura una amplia gama de posibilidades al momento de iniciar la aventura.
“Barcelona es una ciudad que tiene más de 40 mercados de Abasto, hay en todos los barrios. El más importante sin duda es la Boquería, que es el más tradicional y que está justo en La Rambla, el lugar más turístico de la ciudad. Hoy en día este mercado está 100% enfocado en el turismo”, comenta Humberto Crestuzzo, Subgerente de Destinos en COCHA.
La Boquería
Efectivamente este es un mercado que atrae a los viajeros, tanto por su ubicación como por su amplia oferta. Tiene una superficie de 2.583 metros cuadrados y más 300 puestos que ofrecen productos locales y exóticos con una gama de sabores y colores que sorprenden y despiertan los sentidos.
Si bien es mundialmente conocido como La Boquería, su verdadero nombre es “El Mercado de San José” (Mercat de Sant Josep en catalán). Se inauguró en 1840, aún cunado su origen de remonta a una feria libre que se emplazaba en las puertas de la ciudad.
Santa Caterina
“Otro tradicional es el Mercado de Santa Caterina, en donde todavía podemos encontrar al barcelonense haciendo sus compras de frutas y verduras, pescados y mariscos, palpando la vida diaria del ciudadano local”, dice el subgerente de Destinos en COCHA.
Tal como lo señala Crestuzzo, este centro de abastos es más bien de uso local, no tan turístico como La Boquería. Fue creado en 1848 y también se emplaza en el centro de la ciudad, específicamente en el barrio de Sant Pere.
Tiene una extensión de 400 metros cuadrados donde se puede encontrar todo tipo de alimentos. Su arquitectura ofrece un diseño espectacular donde sobresale su techo curvado.
El Mercat de la Barceloneta
Si lo que se busca es degustar especialidades marinas este es el lugar que se tiene que visitar. También fue inaugurado en 1848 y está emplazado a pocos metros de la playa la Barceloneta y fue al aire libre hasta hace pocos años cuando se instaló bajo un hermoso edificio moderno.
En el interior el visitante se encuentra con distintos tipos de locales, tiendas de comida, auto servicio y mucha variedad en la oferta de productos del mar que podrán satisfacer hasta el más exigente de los comensales.
El Mercat de Sant Antoni
Este es uno de los mercados más grandes de la ciudad. Queda en El Raval, un barrio que está renaciendo y que fue antiguo hogar de inmigrantes.
A juicio del ejecutivo de COCHA este mercado “está agarrando una onda propia muy especial, alternativa y que está en la retina de todos” por lo que se recomienda visitarlo. En su recinto se entremezcla la venta de alimentos con miles de cosas en una especie de feria de las pulgas.
Quienes lo han visitado aseguran que este mercado debería ser una visita obligatoria para todo aquel turista que quiere conocer los rincones más profundos de la ciudad condal.
Antes de terminar, Humberto Crestuzzo recordó que el último tiempo “han aparecido muchos mercados flotantes, que se instalan por un tiempo limitado”. Es el caso, por ejemplo, de Palo Alto Market que funciona el primer fin de semana de cada mes. Aquí se encuentran desde food trucks hasta tiendas de diseño.
