SANTIAGO.- Hace exactamente 10 años comenzó a operar el consorcio Biomedical Research Consortium Chile (BMRC), una instancia que consiguió lo que para muchos era algo casi imposible y que no es otra cosa que unir a representantes del mundo universitario, privado y público para avanzar en el desarrollo de la investigación científica en el país, específicamente en el mundo de la biomedicina, con el objetivo de hallar soluciones a los problemas de salud pública que aquejan a los chilenos.
En la actualidad la BMRC integra el trabajo de destacados especialistas de la Universidad Católica con empresas como el Laboratorio Abbott y organismos gubernamentales como CORFO y Conicyt.
A una década de su puesta en marcha este consorcio ya presenta sus primeros grandes logros como el desarrollo de la primera vacuna, segura y efectiva, contra el Metapneumovirus Humano (MPVh) y un avanzado kit para la detección de patógenos respiratorios.
Rebeca Ibacache, gerente general del consorcio, recordó que esta instancia nació precisamente de la inquietud de un grupo de científicos que se dio el trabajo de plantear la necesidad de contar con una institución que asociara “la academia, la empresa privada y al Estado en la investigación y el desarrollo de ciencias de alto nivel que se traduzcan en productos para el beneficio de la salud humana”.
A la fecha, explicó la ejecutiva entrevistada por
EmolTV, BMRC ya cuenta con patentes de sus productos en distintas partes del mundo como Sudáfrica, Canadá, Estados Unidos, China y también en Chile. La idea, explicó, es que “el país se beneficie con nuestros productos y de ahí podamos sacarlos a otras naciones”.
En esa línea, Ibacache no dudo en calificar el consorcio como una instancia exitosa que puede servir como “referente para nuevas alianzas” que impulse el desarrollo científico y tecnológico en el país.
Por su parte, el inmunólogo Alexis Kalergis, doctor investigador del BMRC y líder del equipo que creó la vacuna contra el MPVh, dijo que a esta alianza tripartita también se integra un cuarto actor que calificó como fundamental y que no es otro que la ciudadanía.
“Esta iniciativa conjuga la ciencia desde las universidades con el sector privado, con una visión de prioridades e importancia social que la pone el Estado, actualmente representado en CORFO y antes en Conicyt con su programa Bicentenario”, dijo el investigador.
Pocos científicos pero muy valorados
Alexis Kalergis señaló además que experiencias como la demostrada por la BMRC pueden servir de impulso para que surjan nuevos científicos que trabajen para llevar a Chile a posiciones de relevancia, no solo en el plano científico, sino además que promuevan un cambio en la matriz productiva del país pasando de exportar solo materia prima a productos de vanguardia.
“La ciencia chilena es de alto impacto en términos de productividad por número de científicos. Actualmente estamos 10 veces por debajo del promedio de la OCDE en cuanto a número de científicos por la cantidad total de trabajadores de un país (...) Pese a ello, dentro del mapa mundial somos calificados como muy eficientes y productivos”, relató el profesional.
Añadió que experiencias como la demostrada por el consorcio permitirá además generar más confianza en el sector privado, “donde tenemos el mayor déficit de inversión en ciencia y tecnología”, para que nuevas empresas se sumen a esta iniciativa.
Actuales y futuras investigaciones
El científico comentó que por ahora trabajan en la investigación de soluciones a problemas de salud pública de alto impacto y que afectan a la población chilena, pero que son de proyección global. Por ejemplo, dio el caso de los avances de una vacuna contra el virus sincicial. De conseguir buenos resultados, será un remedio que tendrá “un impacto económico y social enorme”.
"Nos preocupan también otros temas importantes como cáncer a la tiroides. Hay un investigador que ha realizado un trabajo muy exitoso y ha desarrollado una buena estrategia de diagnostico. También tenemos investigadores dedicados a la hipertensión, investigadores que están haciendo pruebas para varias enfermedades respiratorias virales y bacterianas que además de indicar que si la persona tiene un virus en particular, por ejemplo, le va a dar la señal al médico clínico de cuál es el pronóstico de esta enfermedad”, adelantó el investigador.
Por su parte la gerente general de BMRC, adelantó que en 2018 deberían tener mayor claridad respecto del futuro de tres de sus cinco productos más consolidados. “Nuestros sueños son tener la posibilidad que estos proyectos traigan el retorno de la inversión y así nosotros podamos seguir invirtiendo en más ciencia y motivando a que más científicos vean esto como una alternativa, y ojala también surjan más alianzas como la de este tipo”, sentenció.