SANTIAGO.-
Ramón Rivas tiene 66 años y es un emprendedor oriundo de Los Ángeles que elabora té artesanal que nació por un pequeño error.
Su señora le pidió que cociera zanahorias y se le quemaron. Le ofreció café a un amigo, y de broma, le echó un poco de zanahoria quemada. Así surgió el trabajo al que hoy se dedica y sueña con exportarlo.
"Empecé a hacer té de zanahoria y se los regalé a los vecinos y después me decía que por qué no hacía de otra cosa. Hoy día tengo muchos pedidos, gracias a dios, y cada día se van haciendo más", comenta.
La clave de su éxito, según dice, es "la constancia y gracias a Banigualdad (fundación que apoya a los emprendedores) que me aportó con las 'monedas' porque no las tenía, hoy día puedo decir que no me voy a quedar atrás porque ya tengo un respaldo de todos los clientes".
"Me hace feliz y me recrea el contacto con mis clientes a nivel nacional porque yo trabajo en todos lados", añade.
Además, no hace publicidad: "la publicidad la hacen mis clientes".
Conoce más sobre Ramón Rivas, parte de #Creadores, y su trabajo como productor de té con sabores.