Kate Moss este martes durante su visita al Museo de la Moda
EFE
SANTIAGO.- Una gran responsabilidad y tremendo honor tuvo la chilena
Alejandra Del Sante, al ser la
encargada de maquillar a Kate Moss para su
visita al Museo de la Moda este martes. Sin embargo, ambas habían establecido una cercana relación desde que la modelo aterrizó en Chile hace una semana.
La pareja de Martín Cárcamo llevó a la supermodelo británica a pasear por el barrio Lastarria este lunes por la mañana. "Kate quería comprar un sombrero, ver ropa usada y paseamos por la calle Rosas. Fue como un panorama. Caminamos y conversamos", dijo Alejandra a LUN. Al recorrido también se sumó Lila Grace, la hija de Moss; Tota Echeñique, quien ayudó a la maniquí con su styling durante su visita; su manager y la hija de esta.
Al mediodía de ayer se llevó a cabo al evento que convocaba a la top model a nuestro país: la inauguración de una exposición en el Museo de la Moda, del que la británica es embajadora "honorífica". Horas antes, a las nueve de la mañana
Ale y Kate se encontraban para trabajar en el maquillaje.
"No me pidió nada, solamente me dijo que le gustaban los tonos café (...) Sus facciones son impactantes. Tiene la cara dibujada, cualquier cosa le queda bien. Si tú la ves conversando puede que no te llame la atención, pero en un segundo pone una cara como si fuera una campaña de una marca internacional. Es volver a verla en sus 20 o 25 años", relató la maquilladora.
Lo que más le llamó la atención a Alejandra respecto a la supermodelo fue "su simpleza, y me imagino, que la confianza que tiene en sí misma debe ser tan superior, que es de esas mujeres que no se mira al espejo (...) Ella es lo que es, es tremendamente guapa, y en el fondo es súper normal, chistosa y se ríe mucho", agregó Del Sante.
"Te agradece todo muchas veces. Le retocas el pelo y te da las gracias. Es amable, conversadora, te muestra videos en su celular.
Fue una súper bonita experiencia", remató.
Lee aquí la nota completa de LUN. 
