SANTIAGO.- El protocolo de la familia real británica es muy estricto y por ello las
demostraciones de cariño en público son muy escasas. Sin embargo,
con la llegada de Meghan, al parecer las
reglas se han relajado un poco.
Así quedó demostrado hoy, en el marco de la
Copa de Polo Sentebale, un evento de caridad en apoyo a los jóvenes con VIH y sida en Lesoto. En la oportunidad, Harry formó parte del Sentebale St. Regis, que se impuso al Royal Salute.
El duque de Sussex marcó dos de los cinco goles que le dio el triunfo a su equipo y -cómo no-
su esposa debía felicitarlo. Así, durante la entrega de premios posterior al encuentro,
Meghan besó cariñosamente a su marido en la boca.
Crédito: Reuters.Según informó el Daily Mail, al abandonar el evento,
Meghan acarició al príncipe en la espalda, para luego caminar tomados de las manos.
"
La duquesa es encantadora y maravillosa. Estoy muy feliz por Harry. Ambos son afortunados de haberse encontrado el uno al otro, y estoy muy entusiasmado con este nuevo capítulo en su vida", señaló
Nacho Figueras, el reconocido polista argentino y cercano amigo del príncipe, al medio británico.
"Ella dijo que disfrutó el partido. Lo miró junto a mi esposa, lo que es maravilloso porque pudo aprender un poco más sobre el polo", agregó Figueras, quien aseguró que
los duques de Sussex "están muy, muy felices juntos".
En la oportunidad, Meghan eligió un
vestido de Carolina Herrera y zapatos en tono nude de Aquazzura. La tenida la complementó con aros de la marca Birks -su favorita- y una cartera de mano de ratán de J. Crew.
Para su cabello optó por su famoso "moño desordenado", un peinado muy casual que ha utilizado en diversas oportunidades.
Meghan y Harry abandonaron el evento tomados de la mano. Crédito: Reuters.
