La ablación es considerada por muchos somalíes como una tradición fuertemente arraigada en la cultura. (Imagen de referencia)
AFP
SANTIAGO.- "Este es realmente un momento decisivo para Somalia", dijo el viceprimer ministro somalí Mahdi Mohamed Gulaid, esta semana, cuando se dio a conocer la decisión de abrir una investigación, por primera vez en la historia del país, de una muerte causada por la ablación, también conocida como mutilación genital femenina.
Esta última es considerada por muchos somalíes como una tradición fuertemente arraigada en la cultura, por lo que en la actualidad, el 98% de la mujeres entre 15 y 49 años se han sometido a este procedimiento, según datos de Naciones Unidas.
A mediados de este mes,
Deeqa Dahir Nuur, de
10 años, fue llevada junto a sus hermanas a la aldea de
Olol (en el estado somalí de Galmudug), para que les realizaran la operación, pero se cree que la niña
sufrió el corte de una vena, por lo que terminó falleciendo producto de una
hemorragia en un hospital, donde fue llevada más tarde.
La periodista somalí Nafisa Ogle, pariente lejana de Deeqa, fue quien reveló a la opinión pública la muerte de la menor. "
La madre se está volviendo completamente loca; hizo cortar a sus otras tres hijas al mismo tiempo, con la misma cuchilla. Lo triste es que los padres piensan que la mutilación genital femenina es normal y no reconocen los peligros", comentó al medio británico The Guardian.
Un mensaje para el país
El miércoles, en una rueda de prensa ofrecida por organizaciones en contra de la mutilación genital femenina, el fiscal general, Ahmed Alí Dahir, informó que se habían destinado 10 personas para realizar las investigaciones sobre el caso, entrevistar a los padres de la menor fallecida y pedir declaraciones a quien realizó la ablación.
Por su parte, el viceprimer ministro que también estaba presente, comentó que "no es aceptable que en el siglo XXI la mutilación genital femenina continúe en Somalia".
"No debería ser parte de nuestra cultura. Definitivamente no es parte de la religión islámica (…) El enjuiciamiento de los implicados en la muerte de Deeqa enviará un fuerte mensaje al país", agregó.
La ablación está prohibida en Somalia, pero no existen leyes que castiguen a quienes la practican.