"Que se muera ya. Un niño enfermo que quiere curarse para matar herbívoros inocentes", decía uno de los tuits.
Captura El Mundo
SANTIAGO.- Ovacionado, así se despedía Adrián Hinojosa del evento del 8 de octubre del 2016, donde se realizó un homenaje en la plaza de toros de Valencia (España), para recaudar fondos y ayudar a la familia de este niño con los gastos de su tratamiento para el cáncer.
El menor de
8 años soñaba con ser torero cuando grande, y la actividad que le ofreció la comunidad taurina de su ciudad parecía mostrarle algunas luces de ese objetivo.
Sin embargo, muchas personas no estuvieron de acuerdo con el acto benéfico ni con las aspiraciones de Adrián, y a través de Twitter hicieron sus descargos –según la prensa española,
antituarinos-, de tal calibre que llevaron a la familia del menor a presentar una denuncia.
"¿Que qué opino? Yo no voy a ser políticamente correcta. Qué va. Que se muera, que se muera ya. Un niño enfermo que quiere curarse para matar herbívoros inocentes y sanos que también quieren vivir. Anda yaaaa. Adrián, vas a morir", escribió al día siguiente del evento Eizpea Etxezarraga.
Por su parte, Bryan Eduardo Salinas comentó: "Patético es que defendéis a un niño que prefiere matar a un animal, ojalá el Adrián mate a vuestra madre y se muera".
Asimismo, Manuel Ollero Cordero declaró en la misma red social: "Que gasto más innecesario se está haciendo con la recuperación de Adrián. El niño este tiene cáncer, quiere ser torero y corta orejas", informó El País.
Adrián murió seis meses después del evento, el 8 de abril de 2017, producto del cáncer.
"Espero que paguen por lo que hicieron"
La prensa española informó esta semana que un juzgado de Valencia abrió una causa a los tres tuiteros, acusados del delito de incitación al odio por sus comentarios respecto al menor.
El hecho fue confirmado a El Mundo por el abogado y representante de la Asociación Nacional de Afectados por Internet y las Nuevas Tecnologías (Anfitec), Manuel Merino, quien destacó que esta es la primera vez que la justicia de su país actúa contra tuiteros por un deleito de odio, "ajenos al enaltecimiento del terrorismo y la humillación de víctimas y colectivos vulnerables".
Tal como indicó, su asociación pide
tres años de prisión y una multa de diez meses, "a razón de diez euros de cuota al día", indican medios españoles.
El caso Ollero Cordero, según comentó Merino, se enmarca en la libertad de expresión, algo que también defiende el propio acusado, quien solicitó ser exculpado y ya pidió disculpas a la familia de Adrián.
Ante la noticia del procesamiento, Eduardo Hinojosa, padre del niño fallecido, declaró a La Razón que "es un gran paso para el respeto".
"No hay que tener miedo. Vivimos en un país libre y democrático, y esta decisión no hace más que favorecer que niños como Adrián puedan ir a los toros y conocer esta bonita cultura española", dijo. "Espero que paguen por lo que hicieron", agregó.
