"Hay todo tipo de alternativas buenas que no sean globos, muchas formas de expresarse", dijo Kenneth Lacoste, gobernadora de New Shoreham, en Rhode Island.
Héctor Yáñez, El Mercurio
NUEVA YORK.- Ahora que las bombillas de plástico podrían encaminarse hacia la extinción luego de prohibirse en varios lugares del mundo, el amor de la gente por los globos, ¿también podría desinflarse?
Las animadas
celebraciones donde se sueltan globos al aire han molestado desde siempre a los ecologistas porque dicen que las piezas que caen de regreso, terminan siendo ingeridos por peces y tortugas.
Por eso, mientras las compañías ahora prometen prohibir las pajitas de plástico, cada vez hay más
señales de que los globos serán de los productos que tendrán mayor escrutinio, a pesar de que son una pequeña parte de la contaminación ambiental.
Este año la Universidad Clemson pondrá fin a su tradicional liberación de 10 mil globos antes de sus tradicionales juegos, una decisión que es parte de sus esfuerzos de sustentabilidad.
Asimismo, en Virginia, se está extendiendo una campaña que pide usar otras alternativas que no sean globos para las fiestas de matrimonio; y en un pueblo en Rhode Island se prohibió desde este año toda venta de globos para proteger a la vida marina.
"Hay todo tipo de alternativas buenas que no sean globos, muchas formas de expresarse", dijo Kenneth Lacoste, gobernadora de New Shoreham, Rhode Island, quien menciona ejemplos como piñatas, afiches y papeles decorativos.
La agonía de las bombillas
Después de los esfuerzos para limitar las bolsas plásticas, la campaña de los ecologistas contra las bombillas ha ganado impulso en meses recientes, en parte también porque muchos las consideran innecesarias.
Empresas como Starbucks y Disney ya están prometiendo dejar de usar las pajitas, las cuales, además, son difíciles de reciclar debido a su tamaño y casi siempre terminan en el océano. Varias ciudades en Estados Unidos y de otros países como México, ya han aprobado o están considerando medidas para prohibirlas. Y este impulso podría enfocar la atención en otros objetos que la gente tal vez no había considerado antes, como los globos.
"El tema de las pajitas realmente ha ampliado el tema de la basura marina", dijo Emma Tonge de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA). Es posible que la gente no se percate de que los globos sean un peligro, dice, debido a su imagen "liviana y caprichosa".
Aunque los globos no están entre las primeras 10 cosas que se encuentran al realizarse limpiezas en costas, Tonge dice que estos son comunes y especialmente peligrosos para los animales marinos, los cuales podrían también enredarse en los hilos de los globos.