El voluntario Haruo Obata encontró al niño descalzo, en una zona ubicada sobre un huerto de mandarinas.
Captura Asahi Shimbun
SANTIAGO.- Ciento cuarenta policías, helicópteros, drones y perros, además de la ayuda de voluntarios, eran parte del gran equipo de rescate que buscó por tres días a Yoshiki Fujimoto, un niño japonés que todavía no cumplía los dos años al momento de perderse su rastro.
El menor había llegado el pasado domingo junto a su madre a la casa de su bisabuelo, ubicada en la ciudad de Suo-Oshima, en la
isla de Yashiro (al sur de
Japón).
Según informó The Japan Times, ese mismo día
salió a pasear con su abuelo y su hermano mayor a una playa a 400 metros del inmueble y, tras recorrer 100 m del tramo, Yoshiki trató de regresar solo a la casa, autorizado por su abuelo. Tras eso no se supo más de él.
El miércoles por la mañana, Haruo Obata, un voluntario de 78 años que se había unido el día anterior a la búsqueda, comenzó a llamar al menor en un bosque de la zona, y para su sorpresa, obtuvo la respuesta de Yoshiki, quien lo guiaba hasta él respondiéndole: "¡Estoy aquí!".
Obata explicó que encontró al niño descalzo sobre una roca, en una zona ubicada sobre un huerto de mandarinas y que es poco frecuentada por las personas. "Al principio no creí que fuera una figura humana", dijo el hombre a la prensa nipona. "Pero era él. Pensé que se me iba a parar el corazón".
El voluntario le ofreció un dulce a Yoshiki y regresó hasta donde estaba la policía con el menor envuelto en una toalla.
El reencuentro con un sobreviviente
Yoshiki cumplió dos años el lunes, mientras se encontraba perdido en una zona boscosa que registró hasta 34° durante el día, con mínimas de 24°.
A pesar de que suelen haber muchos insectos en el lugar, el niño logró mantenerse a salvo, con apenas unos rasguños "y una ligera deshidratación", explicó Hiroyuki Nishihara, médico del centro donde examinaron al menor cuando fue encontrado.
Por otro lado, los medios japoneses creen que el niño se mantuvo estable, bebiendo agua de los arroyos cercanos. "Me sorprendió encontrarlo con buena salud.
Creo que tiene una gran capacidad de supervivencia", dijo el doctor Yoshimasa Takenoshita tras ver a Yoshiki.
La prensa nipona también indicó que Mio Fujimoto (37), la madre del menor, rompió en llanto cuando se reencontró con su hijo.
Por su parte, Masanori Fujimoto (66), el abuelo del niño, expresó el miércoles sus agradecimientos para el equipo de rescate y pidió disculpas por lo ocurrido. "Perdónenme, ya que fui yo quien dejó de vigilarlo", dijo.