que otros jamás habrían mezclados.
que cumplen con esas características.
A la Olla es un privilegio de restaurante
ubicado en la mitad de un bosque rodeado de árboles nativos, principalmente Hualle y Roble. Uno de los principales objetivos de este lugar es que sus comensales vivan una experiencia en cuanto a comida, atención, lugar y que puedan
disfrutar de la tranquilidad de la naturaleza.
Su carta es
cocina de autor con el enfoque puesto en respetar y tener los mejores productos posible. Una parte de ellos los sacan de su propia huerta y gallinero, preparando además ellos mismos sus conservas, mermeladas y ahumados entre otras cosas, y se abastecen de productores locales con carnes de caza, lácteos, quesos, verduras y todo lo posible que se encuentre en la zona.
Aunque tienen una
carta acotada, es variada y va cambiando por temporada, además de tener una especial para las Fiestas Patrias. Durante la temporada de invierno se pueden encontrar con platos como el ciervo con salsa BBQ al jengibre o la trucha blanca con salsa de naranja y ajos ahumados en roble.
Datos importantes si piensa ir: tienen patentes de alcoholes, se recomienda reservar.
Están
ubicados a 7 km de Pucón por la segunda faja (camino alternativo entre Pucón y Villarrica).
alaollapucon@gmail.com. 942357227.
Lavanda Casa de Té, en un campo de lavanda
Aunque todavía no comienza oficialmente la temporada de
Casa Lavanda de Té, no podemos dejar de mencionar este mágico lugar en el artículo.
Rodeado de una plantación de lavandas, con vista al Lago Llanquihue, en este lugar se combinan el rescate del patrimonio, las nobles lavandas, la maravillosa naturaleza y
todas las propiedades del té.
El terreno donde está Lavanda Casa de Té es donde se asentaron las primeras colonias alemanas al llegar a Frutillar y la tetería era antes la casa del bisabuelo de Kristina Sams, creadora del lugar. Pero la influencia del té no solo le llega a Kristina del lado alemán, sino que por el lado materno eran canadiense-inglés, por lo que la hora del té también era algo sagrado.
Quienes tienen la fortuna de conocer el lugar sabrán que acá
la lavanda no solo se admira sino que también la incorporan a la gastronomía, preparando limonada con ella, miel, syrope y aceites esenciales.
Este lugar está disponible para eventos como talleres y matrimonios y pronto estarán avisando los horarios en que abrirán para la hora del té, brunch y almuerzos, previa reserva.
Fundo Santa Marta Km. 1,5, Camino Quebrada Honda, Frutillar Bajo. 994580804.
Santolla, dentro de un container
Santolla llama inmediatamente la atención de cada turista que pasa por afuera del restaurante, ya que está
emplazado dentro de unos containers marítimos que destacan dentro del escenario de Puerto Natales.
En este local
quien manda es la centolla. Se puede encontrar preparada en todos los estilos, desde cebiche hasta pastel, y quienes vayan en grupo pueden darse el lujo de pedir el crustáceo entero. Para quienes quieren probar otro tipo de carnes, se pueden inclinar por el guanaco, la liebre o también tienen cordero, todas carnes características de la zona.
Tienen una buena carta de vinos y cervezas, pero
no hay que dejar de probar el calafate sour, preparado con un producto endémico.
Magallanes 73 B, Puerto Natales. 612413493.
Restaurant Las Majadas de Pirque, con vista al Palacio
Este restaurante
forma parte de una residencia-hotel emplazada en Las Majadas de Pirque, un parque de ocho hectáreas de árboles centenarios, con fuentes de agua y un palacio restaurado por el Premio Nacional de Arquitectura Teodoro Fernández, que cuenta con seis salas de reuniones.
De lunes a domingo se puede ir a disfrutar de su restaurante del cual está al mando Pablo Heiremans, ex Casaluz, con una
oferta gastronómica basada en productos locales y estacionales. En su carta se pueden encontrar con tentaciones para picar como empanadas de sobrecostilla y chanco; espinacas, cebolla acaramelada y callampa de pino; o pulpo asado y betarraga. También platos especiales para veganos, como unas albóndigas de algas con quínoa, hasta otros más elaborados como el magret de pato al sartén con zeste de naranja.
Ojo, el restaurante no está al interior del palacio, pero sí se puede disfrutar de una maravillosa vista y
hay que reservar antes de ir.
José Julio Nieto s/n, Loteo Parque Las Majadas, Pirque. 23304940.
Kiosco Roca, la picada de picadas
Data desde 1932 y fue elegido como la
mejor picada de Chile por el Consejo Nacional de la Cultura. Y aunque hoy el
Kiosko Roca tiene otras sucursales por el resto del país, no hay como la
original de Punta Arenas. Por supuesto, la estrella de la casa es el
choripán con leche de plátano, combinación a la que los magallánicos ya están acostumbrados pero quienes aún no lo han probado pueden hacerlo con algo de temor, aunque después de tantos años de funcionamiento del Kiosko Roca, se ha demostrado que
estos dos productos sí van bien juntos.
El choripán va dentro de una hallulla con una pasta de chorizo, no con una longaniza entera como muchos se pueden imaginar, y la leche con plátano tiene ese
gusto a calor hogareño como las leches que se preparaban antiguamente. Para quienes quieren algo más contundente tienen choriqueso.
Y no podemos dejar de mencionar otra de las características del local: que está vestido de pies a cabeza con banderines y adornos de la Universidad de Chile.
Pdte. Julio A. Roca 875, Punta Arenas. 612223436.
Casa Bosque Restaurant, sacado de un cuento
Casa Bosque se ha convertido en un
emblema del Cajón del Maipo. Es imposible pasar por afuera del restaurante y no detenerse al menos un momento a admirar esta
casa sacada de un cuento.
Aunque muchos llegan por la curiosidad de la estructura del local que sorprende tanto por fuera como por dentro, la carta es quien invita a los comensales a volver una y otra vez. Tiene una
carta de platos variados, donde se puede encontrar desde costillas de cerdo, pescados y mariscos, platos vegetarianos y su imperdible torta de tres leches.
Una vez terminado el almuerzo se puede ir a recorrer el recinto, donde hay
juegos para niños y también una
terraza para ir a descansar antes de volver a la ciudad.
Camino al Volcán 16829, Cajón del Maipo. 228711570.
Baltinache, fusión indígena en San Pedro de Atacama
Baltinache es, quizás, uno de los secretos mejores escondidos de
San Pedro de Atacama que se transmite de boca en boca. Está en una
pequeña pero acogedora casa, con la cocina a la vista y tiene capacidad para atender a 34 personas, aunque el espacio puede ampliarse hasta para 50 comensales en caso de eventos especiales.
A cargo de este restaurante está
Gastón Vieras, su dueño, en tanto que el chef es
Félix Lara. Ambos trabajan bajo el concepto de
"inspiración indígena", rescatando el uso de
ingredientes ancestrales tanto del altiplano como del sur de Chile. El resultado: recetas únicas y originales.
No tienen carta de comida, pero sí una muy nutrida de bebestibles que incluye algunos de los mejores vinos nacionales, cervezas, aperitivos y jugos.
Actualmente trabajan con un
menú de cuatro tiempos, que va cambiando todos los días. Entre los platos que ofrecen está el
conejo con frutos rojos y guiso de trigo mote; la
vieja frita en cochayuyo y pan con habas de Socaire en mantequilla de Rica Rica; el
guanaco a la olla con verduras, quínoa tricolor y espárragos de Quitor; y la
ensalada de papas andinas y jamón curado en casa.
Domingo Atienza #2. +569 31914225. Miércoles cerrado.