El sujeto no quiso hacerse cargo de los cuerpos de los animales, y estos terminaron siendo enterrados por otros vecinos. (Imagen de referencia)
Fotobanco/Reuters
SANTIAGO.- Los testigos no lo podían creer cuando vieron a un perro y a un gato caer desde el piso 21 de un edificio, ubicado al suroeste de China.
A mediados de este mes, los animales fallecieron frente a los ojos de varios vecinos de un hombre, al que acusan de haber lanzado a sus mascotas desde la ventana de su departamento.
Tal como indican medios locales como South China Morning Post, citando a un guardia de seguridad del lugar, el hecho ocurrió luego de que el sujeto protagonizara una acalorada discusión con su esposa embarazada, a quien ya le había manifestado su intención de deshacerse de los animales cuando ella diera a luz.
Varias personas vieron la escalofriante escena, y algunos compartieron en redes sociales imágenes de las mascotas, un golden retriever y un gato, muertos sobre el pasto, mientras se escuchan los sollozos de una mujer.
Una testigo, que reveló solo su apellido, Chen, dijo a los medios que identificó al perro, de nombre "Jack", porque solía verlo pasear junto al hombre, a quien quiso alertar del hecho. Sin embargo, él no contestó sus mensajes ni tampoco a la puerta, cuando varios residentes fueron a buscarlo.
Fue tras el hallazgo del collar del perro y de su plato de comida, que también habían sido arrojados, que la gente sospechó que no se trataba de un accidente y avisaron a la policía.
Según Chen, los agentes lograron conversar con el hombre, pero él no quiso hacerse cargo de los cuerpos de los animales, y estos terminaron siendo enterrados por otros vecinos en un lugar cercano. Con todo, el sospechoso comunicó más adelante que había sido un "completo accidente" y que "reflexionaría sobre su error".
Y pese a que el hecho causó indignación en redes sociales chinas, la policía no tomó acciones contra el sujeto, ya que -como aseguran en la prensa local- no existen en el país leyes específicas que protejan a los animales.
