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"Espantaba a los clientes": Expulsan a hombre de una cafetería por el aspecto de su rostro tras sufrir un cáncer

Kirby Evans perdió un ojo y su nariz durante su lucha contra la enfermedad. La dueña del local le pidió que se cubriera la cara si quería comer ahí.

16 de Octubre de 2018 | 12:46 | Redactado por Ángela Tapia F., Emol
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Cientos de personas han ayudado a la familia de Evans a reunir dinero, para pagar una cirugía reconstructiva.

Captura Gofundme
SANTIAGO.- "Mi padre fue discriminado por la forma en que se ve. No puede evitar lo que le hizo el cáncer", denunció por redes sociales Brandy Evans, sobre un lamentable episodio que vivió su papá la semana pasada, en Carolina del Sur (EE.UU.).

Según escribió en una publicación que se hizo viral, su padre, Kirby Evans (65), perdió un ojo y la nariz entre las varias intervenciones a las que debió someterse durante su lucha contra el cáncer de piel, hace siete años.

Con su rostro, que muestra los signos de la enfermedad, fue el pasado 8 de octubre a un local de una estación de servicio para comer algo. "Iba a sentarse en una de las mesas pero antes de que pudiera hacerlo, la dueña lo agarró por la camisa y se lo llevó a su oficina", escribió la hija.

Según indicó Brandy, Donna Crosby, la gerente del local, le dijo a su papá que si quería comer ahí tenía que cubrirse la cara. El hombre terminó abandonando el lugar y se fue muy afectado donde su hija.

"Mi padre es el hombre más fuerte que conozco, pero cuando me contó lo que le pasó, vi cómo le salían las lágrimas. Me dolió verlo herido así, especialmente por algo que no puede evitar".

Brandy explicó que por el dinero que gana su papá, le es imposible pagar una cirugía para arreglar su nariz, y que la piel que de la cuenca del ojo que le falta es tan sensible que no puede taparla con nada.

Mientras su publicación se hacía viral en Facebook, la propia Donna Crosby comentó en ella y se defendió: "De ningún modo traté de herir a tu padre. ¡En absoluto! (...) Cuando eres propietaria de un negocio tienes que hacer cosas que no son agradables, pero no tuve elección. Estaba espantando a los clientes".

Consultado sobre su mal momento, Evans habló con un medio local, la cadena WCSC, a la que declaró: "Nunca me habían tratado así. Nunca".

El lado positivo, al parecer, es que el mal rato sirvió para que cientos de personas hicieran donaciones para reunir dinero y ayudar a Evans a operarse y reconstruir su nariz. De una meta de 75 mil dólares (alrededor de $51 millones), a la fecha llevan más de 76 mil.
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